Los Milosevic, al pie del cañón

La familia del presidente Slobodan Milosevic -su esposa, Mira Markovic, y su hijo Marko- se presentó el pasado domingo en público en su feudo, la ciudad de Pozarevac, 70 kilómetros al sureste de Belgrado, y dejó claro, de forma palpable, que los rumores sobre su salida del país eran falsos. Marko Milosevic acudió a las oficinas de la Oposición Democrática de Serbia (DOS), donde advirtió de que no tiene intención de abandonar el país "pase lo que pase".Mira Markovic asistió a una reunión de los partidos de la coalición izquierdista entre el Partido Socialista de Serbia (SPS), que acaudilla su marido, y el suyo, la Izquierda Unida Yugoslava (JUL), comunista. En la reunión, Markovic acusó a la DOS de comprar con dinero de Occidente a los ciudadanos".

Pozarevac es el feudo del clan Milosevic. Esa ciudad del corazón de Serbia fue en su día escenario del idilio entre los adolescentes Slobo y Mira, que en el instituto eran inseparables. En Pozarevac, el hijo del déspota del régimen de Belgrado ha levantado a sus veintitantos años un particular imperio económico, que comprende el parque de atracciones Bambilandia, la discoteca Madona y la radio del mismo nombre, una panadería y un café. Marko es un cacique local al que protegen la policía y matones a sueldo.

El pasado 2 de mayo, en un café de Pozarevac, Marko y sus sicarios pegaron una paliza a tres miembros de la organización juvenil opositora Otpor (Resistencia). El pasado domingo, Marko se presentó en las oficinas de la DOS de Pozarevac, donde encontró a una de sus víctimas, Radojko Lukovic, que ahora trabaja para la coalición opositora que el día 24 ganó las elecciones presidenciales. En declaraciones al diario opositor de Belgrado Glas, Lukovic relata su encuentro con Marko: "Me dijo que no está bien que la oposición declare que va a colgar a su padre. Me pidió disculpas por lo ocurrido en mayo. Me confesó que él en persona le pegó a Sokolovic , pero que fue por error. El quería pegarle a Misha Tadic y lo siente por Sokolovic, a quien ni siquiera conoce. Dijo que había reñido a sus empleados por haberme pegado a mí y que había sido un error. Añadió que no tiene la menor intención de abandonar el país, pase lo que pase".

Mira Markovic aprovechó el domingo para reunirse con sus correligionarios de Pozarevac, ciudad por la que se presentó como diputada a la Cámara de los Ciudadanos. Participó también el ministro del Interior de Serbia, Vlajko Stojiljkovic, del SPS, buscado como criminal de guerra por el Tribunal Penal de La Haya, que inició su carrera política como jefe de policía en Pozarevac. Markovic repitió en su intervención ante sus huestes del JUL y del SPS los argumentos que repite la propaganda del régimen.