Más cosecha holandesa
De Bruijn vence en los 100 metros libres sin demasiada oposición
El PSV Eindhoven, conocido por su equipo de fútbol, se ha convertido en el foco más importante de la natación mundial. Allí se adiestran Inge de Bruijn y Pieter van den Hoogenband, dos de las estrellas de los Juegos. Los nadadores del club holandés han conseguido cuatro medallas de oro y una de bronce, así como cuatro récords mundiales, y dan la sensación de que la piscina les pertenece. De Bruijn venció ayer en los 100 metros libres sin demasiada oposición. Fue la única que bajó de los 54 segundos, barrera que a las demás nadadoras les resulta infranqueable.De nuevo los periodistas irlandeses, ingleses y norteamericanos requirieron una respuesta a Jacco Haerens, el entrenador de Van den Hoogenband y de De Bruijn, sobre el supuesto uso de drogas por parte de algunos nadadores. Por supuesto, pretendían señalar a la campeona de los 100 metros, cuya progresión en los dos últimos años ha sido espectacular. Haerens, harto de tener que dar explicaciones a los anglosajones cada vez que gana De Bruijn, dijo que no iba a decir una sola palabra sobre el tema. Y Ad Koorma, el jefe del equipo holandés, se irritó: "Me importa un bledo si dicen que la reina de Holanda es..., yo qué sé..., un hombre, pero no soporto que se ponga en cuestión las marcas de unos nadadores maravillosos, que pasan miles de controles y que han logrado sus éxitos por la dedicación a su trabajo".
La relación de Haerens con De Bruijn supera lo profesional. Viven juntos desde hace varios años y a nadie extrañó el largo abrazo entre los dos después de la victoria de la holandesa.
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