Sevilla acoge la exposición 'Tiempo de radio', que revive 75 años de la memoria colectiva de España
Las arengas del golpista Queipo de Llano; los gritos de la manifestación por la autonomía de Andalucía; los drámaticos seriales como Ama Rosa y los domingos de fútbol con el Carrusel Deportivo son los sonidos de la historia de España. La exposición Tiempos de Radio 1924/1999, organizada por la Cadena SER, que se podrá visitar en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla entre el 15 de septiembre y el 15 de octubre, hace un recorrido a través de más de 1.000 audiciones de las vivencias de generaciones de españoles durante los 75 años de este medio de comunicación.
Un gran receptor de radio da paso entre válvulas y lámparas a 41 habitaciones en las que se escenifican y, sobre todo, se escuchan documentos sonoros que desvelan 75 años de la historia de España. La Cadena SER ha organizado la exposición Tiempos de Radio 1924 / 1999 para conmemorar la primera emisión oficial de este medio de comunicación. Fue Radio Barcelona el 14 de noviembre de 1924. Desde ese día, los españoles han seguido los vaivenes y sobresaltos de toda una vida a través de las ondas radiofónicas.La exposición se podrá visitar desde el 15 de septiembre hasta el 15 de octubre en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, en el Monasterio de La Cartuja de Sevilla. Desde su inauguración en Barcelona, esta muestra ya ha pasado por Madrid y Santiago de Compostela, reuniendo a más de 100.000 visitantes.
El comisario de la exposición, Joan Ollé, ha pretendido identificar los sonidos y las voces con la vida y los recuerdos de los oyentes: "Somos también lo que oímos. O ¿acaso no hay algo muy profundo de nosotros en los acordes de la canción del Cola-Cao, en los partes del equipo médico habitual [los facultativos que atenían a Franco] o los consejos de la Señorita Francis?"
En el Centro de Arte Contemporáneo se podrán recorrer 1.000 metros cuadrados repartidos en 41 espacios que narran la historia paralela de la radio y España. Estas habitaciones se dividen en seis grandes apartados. En el primero, Érase una vez... la radio, se parte de los orígenes con los grandes receptores y se va recorriendo cada época con el único documento sonoro de Manuel Azaña, se pasa entre barricadas y los terribles sonidos de la Guerra Civil, los discursos de Franco y la voz quebrada de los exiliados.
Se sigue en otro apartado, El dial, donde se descubre una radio entregada al entretenimiento: concursos, humoristas, los gazapos de los locutores, el teatro a través de las ondas y la música clásica. Todo esto entre el obligatorio Noticiario Religioso y los programas de la Sección Femenina.
Deportes de Salón es el tercer espacio. La radio ha sido la protagonista de los domingos gracias al fútbol.
Entonces se entra en El laberinto de la transición. Una etapa en la que la radio adopta un protagonismo fundamental en la consolidación de la democracia. Desde el anuncio de la muerte de Franco a las primeras elecciones, pasando por la inquietante noche de los transistores del 23-F.
Ya asentada la democracia se cruza por La casa de la radio. Todos los sonidos que acompañan las habitaciones de un hogar español: desde los programas de la mañana con las voces de Gabilondo o Del Olmo... a las radiofórmulas musicales, las declaraciones íntimas de la madrugada hasta el futuro: la radio e Internet.
El último espacio a recorrer es En antena. En este apartado funcionará un taller de radio para acercar aún más este medio a todas las personas que visiten la exposición y quieran participar en los programas y se podrá observar los diversos transistores que había en cada época. Todo un universo sonoro que permite viajar en el tiempo para recordar la historia y los protagonistas de la historia de España.
