España reclama que Bruselas aclare el marco de concesión de licencias UMTS

El Gobierno español ha solicitado a la Comisión Europea que se defina sobre el actual proceso de concesión de licencias para móviles de tercera generación (UMTS ) porque entiende que la fórmula empleada en algunos países han supuesto importantes variaciones tanto en el mercado de las telecomunicaciones como en las posibilidades de que los Gobiernos obtengan mayores o menores ingresos para reducir su déficit.

España ha concedido por concurso cuatro licencias UMTS (Sistema Universal de Telecomunicaciones Móviles) por 86.000 millones de pesetas, mientras el Reino Unido obtuvo 6,5 billones por el sistema de subasta, cantidad que se elevó a 8,4 billones en Alemania, también por subasta.Para el vicepresidente español y ministro de Economía, Rodrigo Rato, "es imprescidible" hacer una reflexión al respecto, tanto por la Comisión Europea como por parte de todos los países, para que se produzca un debate en profundidad en la próxima reunión que mantendrán los ministros de Economía y Finanzas de los Quince (Ecofin) el 7 de noviembre en Bruselas.

La Comisión Europea dio libertad en su día a los países miembros para que concedieran las licencias de móviles por el sistema que consideraran más oportuno. Paralelamente, y aunque no ha trascendido ningún documento oficial al respecto, Bruselas aconsejó que las concesiones se efectuaran de tal forma que resultara barato el acceso de los ciudadanos al uso de las nuevas tecnologías, "y en especial de Internet", como precisó ayer Rato en Versalles durante la reunión de ministros de Economía de la UE. "Habida cuenta de que ésa no ha sido la situación", comentó el vicepresidente español, es necesario un debate para determinar "si el espacio radioeléctrico debe tener un cambio sustancial de valor de mercado en relación con los ingresos públicos".

Para Rato, debe analizarse también si esos cambios derivados de la utilización de diferentes sistemas de concesiones "tienen o no consecuencias en la implantación de la sociedad de la información", que en cualquier caso debe producirse "de forma extensa y barata".

Críticas de la oposición

La petición española a la Comisión Europea y los comentarios de Rato guardan relación directa con dos hechos. De un lado, las continuas críticas al Gobierno español por parte de la oposición por entender que el Ejecutivo del Partido Popular ha concedido las cuatro licencias a un precio muy por debajo del valor de mercado, como lo demostrarían las cantidades pagadas en subasta en el Reino Unido y Alemania. Los socialistas, de hecho, han llegado a exigir que se anulen las cuatro concesiones para iniciar de nuevo el proceso desde cero y por subasta.De otro lado, esta misma semana el comisario de la Competencia, Mario Monti, comentó que Bruselas seguía muy de cerca el proceso de concesión de licencias de móviles en toda Europa, pero especialmente en aquellos países en los que se habían manejado costes por debajo del valor de mercado, por entender que podría tratarse de ayudas de Estado encubiertas. Un portavoz de Monti comentó después que existían algunas reclamaciones por los procedimientos empleados en Francia y Holanda y, aunque nadie se refirió a España, en Madrid también parece existir una preocupación por el alcance de las palabras de Monti.

El Gobierno español se plantea ahora la posibilidad de conceder dos nuevas licencias de UMTS para aumentar la competitividad. Paralelamente, el Ministerio de Ciencia y Tecnología está elaborando nuevas normas sobre la utilización del espacio radioeléctrico, a la vez que se maneja la hipótesis de imponer nuevas tarifas y tasas por la utilización del mismo.