Escuela de Rock and Roll

¿Qué músico de rock que empieza no soñaría con que es Keith Richards, de los Rolling Stones, quien le enseña a tocar la guitarra? ¿O Peter Gabriel a componer? A veces, ese tipo de sueños no está tan lejos. Por ejemplo, en Granada. Allí, casi a diario, Eric Jiménez, uno de los mejores baterías de España, ex componente de KGB, Lagartija Nick y actualmente en Los Planetas, da clases de batería para niños de nueve años, músicos que quieren perfeccionarse o a todo el que esté interesado. El resultado: para el nuevo curso ya se han matriculado 90 instrumentistas.Jiménez, uno de los artífices sonoros del espectacular Omega, de Enrique Morente, decidió abrir una academia de percusión el año pasado casi por casualidad. Esperaba tener un puñado de alumnos. Puso unos cuantos anuncios y de pronto se encontró con que tenía a 70 personas esperando en la puerta de su local. El éxito de su primer año ha sido rotundo.

"Yo había visto siempre que existía una carencia bestial en Granada sobre conocimientos de percusión y, al mismo tiempo, mucho interés", explica. "Los que quieren ser músicos siempre se decantan por la guitarra, cuando la percusión tiene muchísimas más posibilidades. Y sin embargo, no hay buenos baterías. Y a mí me gusta enseñar lo que sé y aprender todo lo que pueda".

La academia de Jiménez, que compatibiliza con su trabajo en Los Planetas, no es una academia al uso. "Quería que fuese una escuela de percusión, no de bateristas", comenta. "Por lo general, se forma a los bateristas como si fueran economistas, con mucho ejercicio práctico. Yo, los ejercicios los dejo para que practiquen en casa. Lo que busco es que los alumnos se vuelvan muy imaginativos".

Es, tal vez, la primera escuela de rock, o mejor dicho, de percusionistas de rock del país. Tal vez la fama de Eric Jiménez ha ayudado, pero el caso es que la iniciativa ha sido un rotundo éxito. "El curso pasado", dice, "se me presentó una niña de nueve años que quería aprender a tocar la batería. Yo, por supuesto, la acepté".

El nuevo curso comienza mañana. Lo imparten Eric Jiménez y otro músico contundente, Álvaro Blas, miembro del grupo de rock Starchildren y con la carrera de percusión en su currículo, además de otros dos profesores. No sólo enseñan todas las técnicas, trucos y posibilidades de la batería, sino de cualquier tipo de percusión, ya sean bongos, congas o tabla hindú. "Una de las cosas que más nos gusta enseñar son las técnicas de la música de percusión hindú, que son fascinantes", afirma.

Para este año se espera la incorporación de más expertos en música africana y latina, todos con ganas de renovar el panorama. "En España", afirma Jiménez, "hay un problema de enseñanza: los músicos tienen un buen nivel, pero anticuado. Se enseña con los mismos métodos de hace 30 años. Aún se estudia a John Boham [Led Zeppelin] cuando han aparecido instrumentistas con una imaginación brutal, rompedores".

El músico tiene unos conceptos muy claros. "La mayoría de los percusionistas académicos", dice, "se limitan a interpretar una partitura, cuando lo que hay que conseguir es que hable la batería, no copiarla. Hay que buscarle todas las posibilidades".

El músico granadino, que se caracteriza por su enorme contundencia interpretativa y por una imaginación desbordante, ya tiene una legión de seguidores. Saben que en Granada no sólo se toca rock and roll. También se enseña.