Los accidentes de tráfico aumentaron un 20% en los últimos cinco años
La siniestralidad de las carreteras vuelve a arrojar datos poco alentadores, según el anuario estadístico elaborado por la Dirección General de Tráfico sobre los accidentes registrados en 1999. El año pasado, el número de accidentes con víctimas volvió a crecer, hasta alcanzar la cifra de 44.784, lo que supone un incremento del 20% con respecto a 1995. El incremento de percances en la carretera aumentó el número de heridos leves, pero no así el de muertos y heridos graves, que disminuyeron con relación al año anterior.
Todo indica que las campañas de publicidad tienen escaso impacto entre los conductores. A pesar de que cada vez son más agresivas, la siniestralidad entre los automovilistas aumenta de forma imparable, al menos de momentos. Los datos definitivos sobre el año pasado registran de nuevo un aumento de los accidentes con víctimas en carretera (44.784 sobre 44.388 en 1998) frente a un leve descenso de los producidos en zonas urbanas (55 menos).Tráfico argumenta que el parque automovilístico batió un récord de crecimiento durante el año pasado. Se registraron cerca de dos millones de matriculaciones de nuevos vehículos. Según el Ministerio de Fomento, el tráfico en las autopistas creció un 9,7% sobre un 4,7% experimentado en el resto de la red. Aunque tampoco se puede decir, como hace Tráfico, que hay 22, 4 millones de vehículos circulando. Fomento estima que esa cifra está sobrevalorada en un 17% porque los vehículos viejos son abandonados sin darles de baja.
Pese a todo, el año pasado las muertes por circulación fueron inferiores a las de 1998 (5.738 frente a 5.957), quebrando así momentanemente la tendencia al alza registrada desde 1995. Esa tendencia, sin embargo, se ha roto durante los primeros siete meses del año en curso. De enero a julio se han producido 86 víctimas mortales en el acto más que en el mismo periodo de 1999, un aumento del 3,7%.
- Barcelona, la primera. La provincia de Barcelona y su capital encabezan la siniestralidad de España. En sus carreteras se produjeron 3.556 acidentes, seguida por Madrid (2.454), A Coruña, Alicante, Pontevedra, Valencia y Baleares. Barcelona también lidera la lista de muertos por accidentes en su casco urbano con 184 víctimas, seguida de Madrid (116), Valencia, Baleares, Málaga, Asturias, Zaragoza y Cádiz. Si se suma la siniestralidad en carretera y zona urbana el orden de mayor a menor es el siguiente: Barcelona, Madrid, Valencia, Coruña, Sevilla, Alicante, Pontevedra, Zaragoza, Tarragona, Murcia, Asturias y Granada.
- Peatones. Los peatones atropellados mortalmente disminuyeron en zonas urbanas (503 frente a 448) y en las carreteras (492 frente a 458). En la mayoría de los casos fueron atropellados por cruzar la calzada por lugares indebidos. Aunque una parte importante de estos fallecidos (131sobre 907) ) no cometieron ninguna infracción.
- Ciclistas en carretera. Los ciclistas continúan siendo los usuarios de las vías públicas más vulnerables a los atropellos. Las campañas de sensibilización hacen poca mella entre los automovilistas. Durante el año pasado murieron 97 ciclistas en carretera, frente a 82 el año anterior. Los fallecidos dentro de las ciudades, sin embargo, disminuyeron: de 32 a 23.
- Víctimas jóvenes. Las personas con edades comprendidas entre los 18 y 34 años son las que se enfrentan a un mayor riesgo de sufrir un accidente mortal de tráfico. Aunque representan sólo un 27% de la población, están en esas horquilla el 40% de fallecidos en carretera; además el 80% son varones. El 81% de los jóvenes fallecidos (1.557) iban al volante.
- Meses malos. El mes con más víctimas en las carreteras fue agosto y el que menos, febrero. En las ciudades, el peor fue mayo y el mejor agosto. En carretera y en relación al año anterior fueron meses malos, enero, abril, julio, septiembre y octubre.
- Peores horas. Las horas de salida del trabajo son las más vulnerables para sufrir un accidente de tráfico. En las ciudades, la peor hora es las dos de la tarde. En las carreteras, el mayor número de accidentes de produce a las siete de la tarde y el mayor número de víctimas mortales una hora después (20.00 horas).
- Cinturón y casco. El uso obligatorio de acesorios de seguridad, como el cinturón en los automóviles y el casco en ciclomotores y motocicletas, no se respeta demasiado. El porcentaje de víctimas mortales que no llevaban esos dispositivos se dispara frente a otros usuarios que sí los utilizaban. En los accidentes con víctimas, más del 60% de las personas que llevaban el cinturón de seguridad resultaron ilesas, miestras el 35% de las que no lo llevaban abrochado murieron. La proporción es menor en los ciclomotores con respecto al uso del casco, aunque ofrece datos contundentes. Murió el 35% de los motoristas implicados en un accidente que no llevaban casco, frente al 20% de los que lo tenían.
- Sin carné. Hay muchos conductores que circulan sin carné, a la vista de los datos de los accidentes. De los 75.808 conductores involucrados en un siniestro, 1.483 no lo llevaban. En las ciudades fueron 2.088, de los que 670 se dieron a la fuga.
- Menos infracciones. Las infracciones no son una causa decisiva de accidentalidad. En 24.626 siniestros no se cometió ninguna infracción. Las violaciones de normas más comunes en los accidentes son la velocidad inadecuada, la distracción, no mantener la distancia de seguridad, invadir el sentido contrario, no respetar la prioridad de paso o la señal de stop, girar incorrectamente y adelantar donde está prohibido. En las ciudades, la principal causa de accidentes es la distracción.
- Vehículos viejos. La antiguedad de los vehículos es determinante. Los que tienen entre ocho y 15 años son los de más riesgo. En carretera lo peor es circular con neumáticos en mal estado y en ciudad los frenos.
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