_
_
_
_
_
Reportaje:ANDALUCES OLÍMPICOS

Un espíritu competitivo

El jinete Ramón Beca participa por tercera vez en unos Juegos

Una fotografía en blanco y negro destaca sobre todas las demás en el despacho de Ramón Beca. En ella, un caballo retranca únicamente sobre sus patas traseras mientras el jinete intenta aguantar el equilibrio sobre la grupa. La instantánea refleja un momento de tensión sobrecogedora en la expresión dolorosa del equino, un animal poderoso con una asombrosa fisonomía, lleno de fuerza, y la cara desencajada del caballista. Ocurrió en los Juegos Olímpicos de Atlanta 96. "Estuvimos a punto de caernos, pero al final no nos ocurrió nada", explica Beca en un alarde involuntario de conjunción entre el animal y su dueño.El sevillano Ramón Beca es uno de los cuatro españoles escogidos para participar en los Juegos de Sydney -ya fue seleccionado para Barcelona 92 y Atlanta 96- en la modalidad de concurso completo por equipos. Una competición que aúna doma clásica, salto de obstáculos y cross (carrera a campo a través). La complejidad y la potencia necesaria para esta prueba obliga a que los caballos sigan una preparación especial -"en esta competición no pueden ser delicados de patas", apunta el jinete-, como es el caso de Perseo, el animal con el que Beca va a Sydney y el coprotagonista de la impactante fotografía que el jinete sevillano tiene en su despacho. Perseo, con 14 años, "es irlandés, todavía joven, muy voluntarioso; honesto y duro; rápido y limpio saltando", según su dueño.

NOMBRE: Ramón Beca

NACIDO EN: Sevilla. EDAD: 47 años. ESTATURA: 1,68. PESO: 63 kilos. ESPECIALIDAD: Jinete de concurso completo. EXPERIENCIA OLÍMPICA: Barcelona 92 y Atlanta 96. OBJETIVO: Conseguir un diploma. PALMARÉS: Cuarto en campeonato de Europa.

Beca recalca la necesidad de conseguir una compenetración casi perfecta con el caballo para realizar una buena competición e, incluso, para evitar lesiones: "Tiene que haber confianza mutua. Le voy a pedir que haga un gran esfuerzo. La mayoría de las veces lo que ocurre es que el jinete hace equivocarse al caballo y ahí vienen los problemas".

Durante la competición, los caballos tienen que pasar dos reconocimientos veterinarios. A la mínima insinuación de cojera o lesión del animal, el participante queda eliminado. "En este deporte todo puede pasar porque influye mucho la suerte. Hay posibilidad de subir en la clasificación si el caballo está bien preparado y otro de los competidores queda eliminado por lesión". Por ello, Beca le da enorme importancia a la preparación de Perseo. La puesta a punto final la hacen en Inglaterra para evitar el calor de Andalucía.

El jinete sevillano no descarta conseguir una medalla, aunque reconoce que con un diploma se colmarían las expectativas del combinado español.

Beca pertenece a una familia muy unida al mundo de los caballos. "Mi padre tenía campo y tanto él como mis hermanos montaban. Yo tengo recuerdos de cuando era muy pequeño y ya montaba en un burrillo. A partir de los 17 años comencé a montar con más asiduidad, influenciado por mi familia", recuerda.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

A pesar de sus 47 años, este deportista exhibe una inmejorable forma física. Beca es el participante ideal de unos Juegos Olímpicos. Cumple a rajatabla el espíritu de las Olimpiadas: tan sólo le lleva a competir el placer por participar; no busca dinero ni patrocinadores. "Soy un profesional de mi negocio, pero en el tema del caballo y la competición sólo soy un aficionado. A mi empresa -una firma inmobiliaria- le dedico entre 11 y 12 horas diarias y al deporte unas tres", admite. Eso sí, le gustaría robarle horas al día para atender más a su familia: "Tengo cuatro hijos a los que dedico menos tiempo de lo que me gustaría".

Como para cualquier otro deportista, conseguir la participación en sus terceros Juegos "es un justo premio tras un enorme esfuerzo", dice Beca. Y aunque algunos puedan pensar que con su edad está pensando en el retiro, no hay nada más lejano: "Mi meta está en los Juegos Ecuestres de Jerez de la Frontera en el 2002 y, sobre todo, en la cuna de los Juegos Olímpicos, en Atenas 2004".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_