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Oposición y ecologistas piden el cierre total de la Casa de Campo al tráfico

Antonio Jiménez Barca

La oposición y los ecologistas acogieron ayer con escepticismo, cautela y cierta decepción el anuncio de la edil de Policía Municipal, María Tardón, de cerrar la Casa de Campo al tráfico excepto en horas punta (de siete a nueve de la mañana y de seis a ocho de la tarde). PSOE e IU tacharon la medida de "tímida, superficial y de parche", y reclamaron el cierre "inmediato y total" de este parque. IU pide además un "plan completo" para solucionar, antes del cierre, "el problema de la prostitución".

Microbuses eléctricos

El concejal de IU Gerardo del Val, además de pedir un cierre total de la Casa de Campo a los coches, exige antes de que éste se lleve a cabo -sea parcial o total- "un plan de soluciones del Ayuntamiento para acabar con el problema de la prostitución que ahora se ejerce en esa zona verde".En este parque la policía calcula que hay cerca de 800 personas ejerciendo la prostitución, el doble que el año pasado. "Por eso, hay que tener mucho cuidado para evitar que, si se cierra el parque, no se produzca un problema peor. Las prostitutas son un segmento débil de la población, y desalojar traumáticamente a estas mujeres de la Casa de Campo sin un plan previo puede ser contraproducente. Habría que hacer un estudio profundo de alternativas donde se pudieran asentar estas prostitutas", añade Del Val.

El concejal de IU considera que mantener la Casa de Campo abierta al tráfico en las horas punta "es un error". "Si lo que se pretende es proteger la zona de los coches, no entiendo por qué se deja el parque abierto al tráfico en horas punta, que es, precisamente, cuando más tráfico hay", señala.

Eugenio Morales, concejal del PSOE y portavoz de este grupo en materia de circulación en el Ayuntamiento, sostiene que cualquier solución que no pase por cerrar la Casa de Campo "de forma inmediata y total" a los coches "es una solución tímida, superficial y un parche". Morales considera que la capital ya cuenta con las infraestructuras suficientes como para vetar al tráfico la Casa de Campo sin que la ciudad se resienta. "Pero, claro, para cerrar a los coches esta zona verde hace falta que se dote a la Casa de Campo de los autobuses necesarios", añadió el edil.

El equipo de gobierno del alcalde, José María Álvarez del Manzano, lleva prometiendo desde hace años para la Casa de Campo una flota de microbuses eléctricos. "Pero al final, cuando compran microbuses eléctricos, como ocurrió hace un mes, los ponen a rodar por la calle y se olvidan de la Casa de Campo", resalta Morales. "De la misma manera, el PP ha prometido que se va a cerrar la Casa de Campo al tráfico varias veces y luego nunca lo cumple. Me temo que en esta ocasión ocurra lo mismo", añade.Por su parte, Jesús Sánchez, portavoz de Ecologistas en Acción, calificó el proyecto de María Tardón "de claramente insuficiente y muy tímida", informa Juan Francés. "Es algo que no va a solucionar absolutamente nada la degradación que sufre esta zona verde de Madrid", añadió Sánchez.

Tardón quiere probar la efectividad del cierre al tráfico de la Casa de Campo el 22 de septiembre, fecha en que Madrid se sumará, junto a otras capitales europeas, a la celebración del Día sin Coches.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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