Una mentira piadosa
A veces se contempla el álbum familiar y la materia de infancia se muestra putrefacta. Entonces hay que volver a donde uno estuvo y, si se puede, ajustar cuentas. Eso es lo que hizo Angelica Garnett en Una mentira piadosa. Hija de Vanessa Bell y sobrina de la escritora Virgina Woolf, Garnett escribió para "salvarse del fingimiento": desenvainó la pluma y a punto estuvimos de leer sobre un culebrón. Pues su padre no era quien ella creía, el pintor Clive Bell, sino el artista Duncan Grant, amante a su vez del economista Maynard Keynes. Después, Angelica remató el enredo casándose con el pintor David Garnett, que había compartido amores con su padre, pero también había deseado a su madre. Fue su propia letra la que fue domesticando su estupor y apaciguando determinados recuerdos. Así que al final la confrontación la mantuvo con su propio dolor. Y le salió un libro estupendo, recomendado para los que quieran refrescar sobre los de Bloomsbury. También van a alucinar los que sólo busquen seriales, pues éste tiene mucha, mucha clase.
Autora: Angelica Garnett Editorial: Pre-Textos Precio: 2
751pesetas
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