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Reportaje:VERANO 2000

Usuarios y piscinas han de cumplir las normas

- ¿Qué son? Las piscinas y los campings son lugares de baño y recreo en los que, si bien en principio no tiene por qué ocurrir nada, suelen cogerse enfermedades si no se toman precauciones. Dada las aglomeraciones que estos espacios públicos soportan en verano, se exige el cumplimiento de unas normas higiénico-sanitarias. - ¿Qué hacer? Lo primero que un bañista debe saber es que, después de comer, ha de esperar 45 minutos para bañarse. También es obligatorio ducharse antes de entrar en la piscina para eliminar cualquier resto de crema que quede en la piel. Asimismo es aconsejable no andar descalzo en estos recintos, tanto en el espacio destinada a acampar, como en los vestuarios. Tampoco está permitido tener animales, ni arrojar residuos al suelo. Y a los niños debe enseñárseles a utilizar los sanitarios antes de lanzarse al agua.

- Los remedios. Las cremas protectoras para el sol no deben olvidarse nunca; de este modo se evitarán contratiempos. Además tienen que ser las adecuadas (con la máxima graduación protectora contra los rayos ultravioleta, tipo B, que son los que provocan cáncer de piel) y no las que llevan aceite, pues el efecto será contrario al perseguido. Por otra parte, estas instalaciones de ocio están obligadas, por ley, a cumplir unos requisitos que el usuario debe exigir que se cumplan.

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