Desalojada por un incendio la urbanización donde veranea Aznar

Hasta el mar

Carbonizados. Así quedaron los alrededores de las cuatro urbanizaciones que ayer se vieron afectadas por un incendio que colapsó la provincia de Castellón. Las llamas obligaron a cortar la carretera N-340, la autopista A-7 y el ferrocarril, en un día en el que se preveía el movimiento de más de 100.000 vehículos por la costa castellonense. Las urbanizaciones Les Platgetes de Bellver (lugar de veraneo del presidente del Gobierno, José María Aznar), Torre Bellver, La Renegà y El Rodecho fueron desalojadas.El fuerte viento cambiante dificultó la extinción del incendio. A la hora de cerrar esta edición no se había calculado la superficie afectada, ya que dos focos seguían activos. El fuego se inició sobre las diez de la mañana, y lo que parecía un incendio sin más trascendencia se convirtió en minutos en una cortina de llamas y humo que se propagó hacia los chalés de Les Platgetes, donde fueron desalojadas incluso las casas más alejadas del fuego.

Bomberos, Guardia Civil, Policía Nacional, Seprona y Policía Autonómica fueron llegando a la zona. La Guardia Civil recorrió las calles de Les Platgetes obligando a los vecinos a abandonar sus viviendas. Poco después llegaron los primeros bomberos que, en el momento de máxima intensidad de las llamas, alcanzaron un número cercano a los 150 efectivos. La envergadura que adquirió el siniestro obligó a recurrir a los efectivos aéreos, tres airtractors, cuatro helicópteros, dos dromaders y dos hidroaviones, llegados desde Zaragoza y Madrid. Sin embargo, el intenso viento impidió controlar las llamas. A mediodía, los medios terrestres hubieron de reagruparse para tomar nuevas posiciones y tratar de atajar el incendio abriendo cortafuegos.

Lo que parecía que sólo afectaría a Les Platgetes y sus alrededores se extendió rápida y vorazmente. La N-340 y la A-7, que en otras circunstancias hubieran actuado de barrera, no frenaron el fuego, sino que las superó con facilidad. Así, la situación se tornó alarmante porque mientras los rescoldos seguían vivos en Les Platgetes, el fuego arrasaba otras urbanizaciones. Con este panorama, los efectivos que trabajaban en el incendio resultaron insuficientes. Sólo el mar consiguió parar las llamas, especialmente en La Renegà.Los vecinos de ésta última zona residencial se quejaron de la tardanza en la llegada de los medios de extición y señalaron que mientras en la urbanizaciones "de lujo" de Les Platgetes y Torre Bellver se acumulaba un gran número de medios, las más modestas, como La Renegà y El Rodecho, veían arder sus laderas sin que las brigadas acudieran a tiempo. En unas y en otras los propios vecinos hubieron de colaborar en la extinción del fuego. Las cuatro urbanizaciones suman alrededor de medio millar de viviendas, que fueron desallojadas.

La Guardia Civil esperó hasta las 13.45 para cortar la N-340, cuando las llamas ya eran visibles desde ambos lados de la carretera. El tráfico ferroviario fue suspendido momentos antes y restablecido dos horas después.