Sobre la historia del PCE

En el artículo de Antonio Elorza El viaje a ninguna parte, publicado el 2 de julio, se alude a mi libro Historia oculta del PCE sin mencionarlo. Con ello se dificulta que los lectores puedan acceder a él y valorarlo por sí mismos. Es un método, cuando menos, poco correcto.Elorza considera que mi libro está "compuesto con refritos propios y refritos ajenos no respaldados por la oportuna mención de origen". Supongo que aceptará que el uso de citas depende del tipo de publicación. En mi caso, la editorial consideró que no eran oportunas en un libro que en 300 páginas sintetiza la historia del PCE. Elorza debe de saberlo, porque en su libro La historia de ETA, publicado en la misma colección que el mío, tampoco figuran citas. ¿También es, por tanto, un "refrito"?

A Elorza le parece "injusto" que en mi libro estudie los líos

amorosos de Pasionaria con Antón. Pero estos líos tuvieron una gran dimensión política. Sus protagonistas fueron la número uno del PCE y el que había llegado a número dos bajo su protección. Y no terminaron en privado, sino con una purga en la que intervino el buró del partido. Analizarlos no es cotilleo, sino estudio de la terrible incidencia del estalinismo en la vida privada.

Por último, sostiene que Pasionaria, al condenar la invasión de Checoslovaquia, criticó los excesos de la socialización (sic) en las democracias populares". Mientras Elorza no publique "la oportuna mención de origen" de tal afirmación, seguiré pensando que Pasionaria fue una convencida prosoviética hasta su muerte. A sus múltiples mítines, declaraciones y silencios me remito. Lo más sorprendente y lamentable es que estas críticas de Elorza, destinadas a apuntalar el maltrecho mito de Pasionaria, se realizan en un artículo cuya tesis central -el comunismo fue un viaje a ninguna parte- comparto y que, curiosamente, coincide con la que sostiene mi libro. - José Estruch. Barcelona.