L'Aliança logra 974 millones de beneficio con medidas de ahorro
L'Aliança, la primera mutua sanitaria catalana en número de socios, multiplicó por nueve sus beneficios el año pasado respecto al ejercicio anterior. Ramón Carranza, director general de la entidad, afirmó ayer que en 1999 los beneficios netos de explotación alcanzaron 974 millones de pesetas, y el año anterior habían sido de 109 millones. Este importante incremento se logró, según Carranza, mediante una política de reducción de las partidas pagadas a proveedores, cifrada en 1.000 millones de pesetas.El director general señaló que la mutua acordó con los proveedores de productos analíticos y radiologías recortes del 50%. En las resonancias magnéticas, la reducción del gasto fue del 30%. Esta medida y el aumento de un 15,8% de los ingresos motivaron el fuerte aumento del beneficio neto de explotación. No se produjeron ingresos atípicos.
La partida de amortizaciones se mantuvo en 1999 igual que el año anterior, es decir, en torno a 500 millones de pesetas. El grupo redujo su deuda 911 millones el año pasado.
El volumen de ingresos de la entidad ascendió a 22.462 millones de pesetas, un 15,8% más que en el ejercicio anterior, en el que fue de 19.386 millones de pesetas. Según el director general de L'Aliança, estos resultados son relevantes teniendo en cuenta que entre 1991 y 1995 la compañía afrontó una crisis que la llevó a perder 76.000 socios.
El grupo tiene hoy 218.000 socios y pretende incrementar este número con 24.000 nuevos afiliados anuales hasta el año 2003, con lo que alcanzaría una facturación de 36.000 millones de pesetas.
El director general de la mutua afirmó ayer que ésta ha invertido 950 millones de pesetas en mejoras en sus centros hospitalarios y 500 millones en Gecessa, empresa filial de L'Aliança que gestiona la salud en Andorra. El grupo pretende también crear un portal de Internet para ofrecer servicios sanitarios en la red.
