Los programas 'de realidad' comen terreno a la ficción en las tendencias televisivas de la próxima temporada

Los altos contenidos de ficción que han predominado en la mayoría de las cadenas televisivas pasarán a la historia a corto plazo. La apuesta pasa ahora por la realidad, aunque conlleve "menor calidad" de imagen a favor de la veracidad. Las causas del cambio vienen determinadas por el éxito de Gran Hermano, emitido por Tele 5 y dos televisiones de pago, convertido ya en baluarte de la realidad y de las emociones en directo. Los sucedáneos del polémico espacio de la productora Endemol invadirán las pantallas en las temporadas próximas.Éstas son algunas de las conclusiones del curso Nuevas tendencias en la programación televisiva, que la Universidad Rey Juan Carlos I ha celebrado en Aguadulce (Almería). En opinión del director del curso y profesor de Comunicación Audiovisual de la Complutense, José Miguel Contreras, "hay una nueva forma de entender la programación. El hecho de que haya aumentado el número de canales ha motivado el nacimiento de la televisión acontecimiento, con espacios que el espectador no puede perderse y elementos que sirvan de conexión entre toda la sociedad. El modelo de espectáculo tradicional parece entrar en crisis".

Luis de Zubiaurre, subdirector de la consultora GECA, repasó las propuestas de "televisión impactante" que ya triunfan en otros países. Entre ellas, El autobús, en el que los concursantes conviven en un vehículo y recorren lugares del país; El bar, en el que los participantes regentan un local de copas con cuyos beneficios conviven en una casa anexa, también llena de cámaras; Encadenados, en el que una chica convive atada con grilletes a cinco chicos durante seis días y debe eliminarlos de uno en uno hasta decantarse por su pareja ideal; Quién es el topo, con diez personas que viajan tres semanas y deben averiguar quién boicotea la convivencia entre ellos; o Dinero por tu vida, en el que los propios concursantes graban momentos interesantes de su existencia.