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Cadenas en la carretera a Cabanes

María Fabra

Tres jóvenes encadenados a la máquina que efectuaba las labores de limpieza de un huerto de almendros impidieron, en la mañana de ayer, la continuación de las obras de la carretera Oropesa-Cabanes, que se encuentran paralizadas por un auto judicial en un tramo de tres kilómetros. Debido a la decisión del titular del juzgado número 9 de Castellón de paralizar las obras en el tramo en el que, según el proyecto, se invade el paraje natural del Desert de Les Palmes, la empresa ha retomado su trabajo en otros puntos del trazado. Sin embargo, miembros de la Coordinadora dels Pobles, que engloba a más de una docena de colectivos, impidieron el trabajo de las máquinas. Portaban una pancarta bajo el lema "Prou destrucció. La terra verda i lliure". La Guardia Civil les comunicó que la empresa había presentado una denuncia ante el juzgado de guardia ante el impedimento de llevar a cabo las obras. Mientras, por su parte, el diputado autonómico de Esquerra Unida por Castellón, Ramón Cardona, trataba de mantener una reunión con el consejero de Obras Públicas, José Ramón García Antón, con el fin de iniciar un diálogo ante la decidida actitud de la administración de seguir con las obras.

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