La mayoría de los 998 delegados del PSOE sigue sin decantarse por ningún candidato

Madrid ha sido la excepción entre todos los congresos provinciales del PSOE celebrados para designar a los 998 delegados que elegirán en el congreso de julio al nuevo secretario general. La lista encabezada por la candidata guerrista Matilde Fernández obtuvo el 62% de los votos. Los delegados de las demás organizaciones se decantan por ahora por distintos candidatos. En las cúpulas regionales sí se vislumbra que José Bono podría tener ya "una ligera mayoría".

Después de un mes de asambleas y congresos, ayer quedaron elegidos los 998 delegados que acudirán en Madrid al congreso federal que decidirá entre los días 21, 22 y 23 de julio al secretario general del PSOE y que definirá un proyecto para España y organizativo para su partido. La profunda división de los socialistas se ha puesto de manifiesto en estos congresos, con profusión de candidaturas enfrentadas, cuyos militantes han estado más pendientes de sus problemas territoriales que de la decisión que ahora está en sus manos respecto a quién será su futuro líder. Así se explica que en la inmensa mayoría de los congresos provinciales no se han pronunciado los nombres de José Bono, Rosa Díez, Matilde Fernández y José Luis Rodríguez Zapatero, los cuatro aspirantes a ese cargo.

La excepción ha sido Madrid. En primer lugar porque una de las candidatas, Matilde Fernández, ha encabezado a un sector y su candidatura ha resultado mayoritaria, con el 62% en una lista fruto de un pacto "contra natura", según expresión del cabeza de la otra lista, Jaime Lissavetzky, que pese a ser el secretario general de la FSM obtuvo sólo el 38%.

En la lista ganadora ha confluido el sector guerrista de José Acosta; Izquierda Socialista; antiguos borrellistas; Renovadores por la Base y Nueva Vía, grupo que lidera José Luis Rodríguez Zapatero, representado fundamentalmente por Trinidad Jiménez, asesora internacional del PSOE. "Es difícilmente digerible que la izquierda del partido haya pactado con el ala social-liberal", dijo Lissavetzky tildando así a Nueva Vía, informa F. Javier Barroso.

Estas descalificaciones le produjeron "tristeza" a Fernández, que pidió a su compañero Lissavetzky que abandone la costumbre de las etiquetas y destacó el "carácter plural" de su lista en la que figura el ex vicesecretario general del PSOE Alfonso Guerra. "Los delegados tienen libertad de conciencia, de criterio y de opinión y serán dueños de sus votos", dijo Fernández. Esta candidata aspira en el congreso no sólo a obtener los votos guerristas y del ala izquierda del PSOE sino a aumentar su franja que aunque en Madrid es mayoritaria en el conjunto de España, según cálculos de sus adversarios, no supera el 25%.

En la lista de Madrid ha resultado elegido el portavoz de Iniciativa por el Cambio, Manuel Escudero. Y según sus cálculos un 10% de los delegados siguen las tesis de ese grupo, que tampoco ha definido aún su candidato. La satisfacción de Escudero es total al observar que sus propuestas de apertura y participación interna, sobre todo con las primarias, han sido aceptadas masivamente por todas las federaciones.

Lissavetzky anunció por primera vez en público su apoyo a Bono. Esto no ha extrañado a los guerristas, que aseguran que toda la candidatura renovadora apoya al presidente de Castilla-La Mancha, con alguna excepción de seguidores de Rosa Díez.

Esta situación no se ha dado en ninguna otra federación. En general, persiste el silencio. Los delegados, además, han sido elegidos sin mandato imperativo de los afiliados, es decir sin obligación de votar en el congreso a un candidato determinado. Los aspirantes minoritarios, todos menos Bono, se aferran a esa libertad individual de los delegados para considerar que la situación está abierta.

Desde las filas de Rosa Díez se enfatiza esta situación, según su coordinador de campaña, Luis Atienza, ex ministro de Agricultura con Felipe González. "Delegados declarados respecto a un candidato hay muy pocos y sabemos que el grado de disciplina o fidelidad a las consignas que puedan recibir de los aparatos territoriales no va a ser como en el pasado", aventura Atienza. Este político coincide con otros interlocutores en que donde sí hay fidelidad total es en el guerrismo, donde todos los votos irán para Fernández.

En efecto, descontando el porcentaje del ala izquierda, el resto, quizá un 70% se dividirá entre los apoyos a Bono, Díez y Rodríguez Zapatero. Y todos miran hacia lo que suceda en Andalucía.

- Andalucía. La holgada victoria de los oficialistas en Andalucía ha sido interpretada como un "espaldarazo" al liderazgo de Manuel Chaves. Hubo listas enfrentadas en todas las provincias, a excepción de Málaga, pero sólo la de Granada (una fusión entre guerristas y borrellistas) superó la barrera del 20% para obtener delegados. La dirección andaluza calcula que las minorías apenas alcanzan el 10% de los 287 representantes de su federación, con mucho la más numerosa de todas.

La unidad de criterio de Andalucía en torno a Chaves le confiere un papel determinante en la elección del nuevo secretario general, pero aún no hay una posición clara. El secretario de Organización andaluz, Luis Pizarro, anunció ayer que a partir de ahora se abre el debate para designar al candidato que apoyará su federación, informa Isabel Pedrote.

- Asturias. La elección de los 28 delegados socialistas asturianos ha reabierto la división interna en la FSA-PSOE entre el sector guerrista, mayoritario, y las facciones minoritarias: los renovadores de Vicente Alvarez Areces y la llamada Tercera Vía, de Antonio Trevín. La lista oficial, guerrista, la encabezó el secretario general de la FSA, Luis Martínez Noval, y mantuvo su hegemonía, con el 54,7% de los votos (16 delegados) y una ligera tendencia a la baja. Los renovadores más Tercera Vía serán 12, informa Javier Cuartas

- Comunidad Valenciana. El sector crítico, que reúne a diferentes familias por su oposición a la gestión realizada por del ex secretario federal de Organización Ciprià Ciscar, ha conseguido casi el 70% de los 96 delegados en disputa frente al 30% de los ciscaristas. La mayoría de delegados de la segunda federación en número de militantes no tiene decidido su apoyo a ninguno de los aspirantes a la secretaría general. En Madrid estarán presentes todos los referentes del socialismo valenciano, a excepción del portavoz en la comunidad de Rodríguez Zapatero, Jordi Sevilla, que no ha logrado acta de delegado, informa Joaquín Ferrandis.

- Castilla y León. En las nueve provincias se han elegido 48 delegados en unos congresos que en su mayoría han contado con dos listas, lo que deja muy abierta su posible tendencia de voto excepto para los guerristas en Valladolid, para Rosa Díez en Avila y Rodríguez Zapatero en León. La presentación de dos listas en Valladolid ha determinado que Jesús Quijano, secretario regional del PSOE, no vaya como delegado al vencer los partidarios de Matilde Fernández. Tampoco acudirá como delegado por Salamanca el diputado Jesús Caldera, uno de los promotores de la Nueva Vía. El portavoz del PSOE en el Senado, Juan José Laborda, encabeza la delegación de Burgos, de la que se cayó el alcalde, Angel Olivares, informa Francisco Forjas.

- Cantabria. En el congreso de Santander la lista encabezada por Jaime Blanco, oficialista, y Ángel Duque, renovador, obtuvo el 75% de los votos mientras la presentada por Izquierda Socialista recogió el 4,5%. La lista triunfante se asegura los 11 delegados, informa Jesús Delgado.

- Aragón. Por primera vez los socialistas aragoneses acuden unidos y con una sola voz a un congreso. Los 41 delegados estarán encabezados por el presidente autonómico Marcelino Iglesias. Como prueba de buena voluntad las listas se han hecho en orden alfabético, informa Concha Monserrat.

- Castilla-La Mancha. Albacete fue la única provincia en la que la corriente critica del PSOE en esta comunidad presentó una lista alternativa a la oficial encabezada por el presidente autonómico y aspirante José Bono, que obtuvo un respaldo del 84%, frente al 13,5% de la candidatura de Francisco Delgado. Esa lista no se mantuvo para elegir a los 69 delegados regionales al congreso federal. En el resto de las provincias se presentaron listas únicas que recibieron el respaldo mayoritario de los afiliados, informa Isabel Salvador.

- País Vasco. En Vizcaya, la lista encabezada por Txiki Benegas y Rosa Díez, alternativa a la oficial, logró el 64% de los votos y nueve delegados. La opción del secretario general, Patxi López, obtuvo el 35% y cinco delegados.