Ya huele a fiesta

El vaho espeso y negruzco que se escapa de sartenes cuartelarias y el tufo del aceite que hierve por enésima vez es una de las señales inequívocas de que en cualquier plaza de España, Alicante en el caso que nos ocupa, ya huele a fiesta. El olfato es un sentido conectado directamente con la memoria, y en los días venideros se sucederán los aromas y hedores de las Fogueres de Sant Joan. Los veteranos se servirán de ellos para rememorar los buenos o malos momentos de fiestas ya amortizadas. Los que pisen el junio alicantino por primera vez, los incorporarán a su cerebro asociados a las experiencias que les esperan de aquí al domingo.Ayer las hogueras continuaban alzándose en casi todos los barrios de la ciudad. Las calles y plazas e incluso avenidas principales estaban tomadas por miles de personas que trabajaban en grupo, fácilmente clasificables en función de las camisetas con lemas comunes que lucían muchos de los que arrimaban el hombro. Los barraquers colocaban las vallas que delimitarán el perímetro de sus fiestas cada vez menos particulares. La mayoría, hombres con sombreros de paja y riñoneras de cuero negro, y alguna que otra mujer voluntariosa dispuesta a irrumpir martillo en mano en nuevos espacios de la fiesta.

Un poco más allá, un macrochiringuito colgaba sus trofeos culinarios: ristras de ajos gordos como puños y decenas de jamones que con la calima comenzarán a sudar la grasa cuyo olor untará las muelas de los viandantes. En este templo de la comida recia donde las hogazas de pan de varios kilos se apilan flanqueadas por columnas de queso manchego se abrasan los embutidos en las calderas. Mientras, el encargado del pa amb tomaca hace lonchas de las patas de gorrino que ya comienzan a transpirar. Enfrente, un puesto modesto atrae a los peatones a la hora de la cena con efluvios de perritos calientes, churros y azúcar quemado.

En estos mismos recintos, con el paso de los días se enseñoreará el aroma del vino agrio que se ha coagulado en el asfalto y que en las horas de más calor emana vapores etílicos que saben a juergas ya corridas.

Pero hay más olores. El de la frustración se identificaba ayer con el del corcho recalentado sobre el pavimento. Un amasijo donde apenas nada se podía reconocer se amontonaba en un rincón de la calle de Pinoso. Es todo cuanto queda del remate de la foguera de Carolinas Altas, cuya comisión quiso reinar el mismo año que su bellea, María del Mar Rodrigo, había sido elegida Bellea del Foc de Alicante. José Lorente Satoca, presidente, reconoció ayer que la hoguera superaba en dos metros la altura máxima (20 metros). A esta comisión ya se le han caído cuatro monumentos, con el agravante de que el de este año había costado 14 millones y era el más caro de la historia de la fiesta. Lorente aseguró que el año que viene encargará un informe técnico para que la historia no vuelva a repetirse.

Pero la fiesta sigue para los que han conseguido que su foguera se mantenga en pie. En los distritos huele a la pintura fresca con la que los artistas dan los últimos retoques a sus figuras durante la plantà, que terminó oficialmente ayer a las 24.00. A veces, el olor del pigmento se confunde con los dulces ungüentos y pócimas after-sun que embadurnan la piel de visitantes venidos de la Europa norteña que aprovechan los primeros momentos de la noche para ver los monumentos antes de entrar a un discobar en busca de la primera copa.

Sólo hay un sitio donde la fiesta no huele. En Internet, la dirección www.fogueres.com alberga la página oficial de las fiestas, desarrollada por la empresa ALC Sistemas. Ofrece información histórica y actualizada sobre la fiesta oficial de Alicante, con el programa de actos completo, artículos y noticias sobre los diferentes aspectos de Fogueres, fotos de las belleas, posibilidad de configurar imágenes de la fiesta como papel tapiz e incluso el himno de Alicante en formato MP3. Un único defecto: no está en inglés, con lo cual desperdicia una de sus bazas más importantes, como es servir de reclamo para los miles de extranjeros que visitan anualmente las Fogueres.

La principal novedad de la página este año es la primera retransmisión vía web de la cremà, que podrá seguirse también por el diario digital Alacant Express (www.alacantexpress.com). Se realizará a través de una web-cam (cámara que capta imágenes para ser visualizadas por Internet) instalada en el balcón del Ayuntamiento. Así, los internautas podrán asistir en directo a la combustión de la foguera oficial sin sentir el calor de las llamas en el rostro... y sin oler a gasolina.