Nadie cubre el éxito de España

A cinco días del comienzo de la Eurocopa, la Federación Española se ha quedado sin seguro para cubrir las consecuencias económicas de un éxito en el torneo. Tenía un precontrato firmado con una compañía, pero finalmente será la propia Federación quien deberá asumir los más de 1.000 millones de pesetas en primas que ha prometido a sus jugadores por ganar la Eurocopa. Las aseguradoras han intentado fijar un nuevo precio a la póliza y establecer otras condiciones, excesivas según los directivos federativos, que tienen su origen en los recientes éxitos del fútbol español, unidos a una serie de siniestros que han sembrado de suspicacias a las aseguradoras: los descensos del Atlético y el Betis, por ejemplo. El estado boyante de la selección desencadenó las prevenciones. No hubo ni una sola compañía que se arriesgase a avalar lo que considera un riesgo muy elevado: invertir dinero sobre la perspectiva de un fracaso de la selección española. Si antes del Mundial de Francia la Federación pagó un precio de 180 millones de pesetas para cubrir las primas en caso de alcanzar los cuartos de final, las semifinales y la final, ahora, la misma compañía, Global Maritime, sólo contrataría un seguro por un precio de 250 millones. Esta cantidad, además, sólo garantizaría el pago del 70% de los premios prometidosa los jugadores. Y a estas condiciones, el secretario general de la Federación, Gerardo González, ha respondido con una negativa. "Teníamos un precontrato firmado, pero ellos revisaron las condiciones y no pudimos aceptarlas, porque nos subieron el precio de la póliza en casi un 50 por ciento, y además dejaron de cubrirnos los cuartos y la semifinal", se justificó. En consecuencia, el total que deberá desembolsar la Federación si España gana la Eurocopa supera los 1.000 millones de pesetas en concepto de primas. Los 22 jugadores cobrarían 45 millones cada uno por levantar el trofeo; el seleccionador se llevaría 90 millones.

Hasta nueve firmas diferentes patrocinan a la selección, con una aportación de 1.200 millones de pesetas anuales. Serán ellas las que corran con las consecuencias de la falta de un seguro. Si España alcanza la final, los mismos patrocinadores pagarán 1.400 millones por el título, o 1.200, si no se consigue. Por llegar a las semifinales, 900.

Las compañías de seguro han tenido la oportunidad de constatarlo la incertidumbre del fútbol en la última temporada. El resultado ha sido un gasto sideral. A ello han contribuido, sobre todo, el Atlético y el Betis, que tenían firmadas dos pólizas para cubrir el riesgo del descenso. El hundimiento del Atlético, por ejemplo, le ha supuesto al club el ingreso de 3.000 millones -el equivalente a los derechos de televisión que dejará de cobrar la próxima temporada-, por jugar en Segunda. Las perjudicadas han sido varias compañías de seguros, en su mayoría británicas, que se hicieron responsables del riesgo. El éxito de los clubes españoles en las competiciones europeas también ha roto muchas previsiones. Las de los clubes italianos, sobre todo. Atendiendo a sus presupuestos como índice de éxito futuro, clubes como el Inter, el Milan, el Lazio o el Juventus estaban llamados a hacerse con los trofeos de media Europa. Pero fue España la que colocó a tres equipos en las semifinales de la Liga de Campeones. El cuarto fue el Bayern, un alemán. Italia hizo agua. Y para colmo, la Liga italiana no la ganó uno de los tradicionales, sino el Lazio. De ello se benefició el Juventus, acostumbrado a ganar temporada por medio. El Juventus se embolsó cerca de 1.000 millones de pesetas, la cantidad que le garantizaba un seguro por lo que parecía una contingencia improbable: quedar segundo en Italia. La puntilla la puso la selección española que derrotó con autoridad a Italia en Montjuïc, hace dos meses. Entonces las aseguradoras dijeron basta.