"Yo no era el número dos de Convergència"

Pasará a la historia como uno de los motores del giro soberanista de Convergència Democràtica, no en vano Pere Esteve (Barcelona, 1942) es el alma máter de la Declaración de Barcelona, suscrita por CiU, PNV y BNG.Pregunta. ¿Por qué le ha cedido a Artur Mas en bandeja de plata el puesto de número dos de Convergència?

Respuesta. Porque éste era el objetivo estratégico. Las cosas tienen que hacerse bien, y ahora se han hecho así, sobre todo si los objetivos estaban claros. Después de una distribución de roles dentro del partido, debía confirmarse el liderazgo del futuro y desarrollar las estrategias adecuadas. Esto es lo que había que hacer. Y por supuesto, esto es fruto de una planificación.

P. Pero ¿cómo definiría su actuación? ¿Cómo un acto de contrición o cómo un acto de caridad cristiana? Porque usted hace meses confirmó públicamente que optaría a la reelección como secretario general.

R. Ni lo uno ni lo otro. Siempre he dicho que estoy dispuesto a presentarme. Y hoy también. Si Mas no se presenta, me presento yo.

P. Que Artur Mas sería el futuro número dos de Convergència se sabía desde hacía tiempo, si no públicamente sí entre bambalinas. ¿Por qué han tardado tanto en comunicarlo?

R. Artur Mas no ha comunicado nada. Ha sido el secretario general quien ha tomado una decisión personal y que facilita la consolidación de un liderazgo que mucha gente en el partido deseaba y quería. Y he comunicado mi decisión ahora porque era el momento oportuno. No lo era en los intervalos entre las pasadas elecciones, las municipales, europeas, autonómicas o generales. Estoy seguro de que hoy era el momento, que todo lo que hemos planeado saldrá bien y que haremos un gran congreso.

P. O sea que no han aprovechado ustedes unos momentos de debilidad de sus socios de Unió Democràtica para comunicar su relevo.

R. No. Los problemas de Unió se han desarrollado en función de un calendario que nos es ajeno.

P. Tanto el presidente como usted han destacado que su decisión tiene que interpretarse en clave interna de Convergència. Pero no me negará que tendrá importantes repercusiones en la coalición.

R. Todo lo que se hace en uno de los partidos tiene repercusión en la coalición.

P. ¿Y cuál es?

R. Que la coalición se fortalecerá. Hasta hace poco uno de los partidos ya tenía claro cuál debía ser su dirigente del futuro. A partir de ahora Convergència también lo puede tener más claro.

P. Pero entre los dos tienen que elegir el liderazgo de la coalición.

R. Esto lo tenemos que decidir según un procedimiento, y todavía no hemos negociado el método. Depende de la refundación de la coalición de Convergència i Unió.

P. Y ahora, el hombre que trabajaba para el horizonte 2010 ¿en qué se convertirá? ¿No será usted quien lo aplique?

R. La relación cargo-trabajo no es unívoca. Como hay mucho trabajo y yo tengo muchas ganas de trabajar, el lugar que ocupe no tiene importancia. Ya se decidirá, pero no antes de que Mas decida si ocupará la secretaría general.

P. Usted le ha pasado el relevo a Mas, pero ¿cuándo lo recibirá Mas del presidente Jordi Pujol?

R. Los pasos ya se están dando.

P. Le pregunto cuándo.

R. Específicamente no lo sé. Ya lo veremos. El déficit de Convergència era no tener un número dos.

R. ¿Usted no lo era?

R. No. Orgánicamente sí, pero políticamente no. Éramos varios. Ahora sólo hay un número dos en este proyecto de futuro.

P. Ahora que no ocupará la secretaría general, saldrá de las listas de faltas de asistencia en el Parlamento Europeo.

R. Ya no estaba en las listas. Desde diciembre he asistido al 74% de las sesiones, es decir, claramente por encima del promedio.