Ciutadans pel Canvi pretende consolidarse como movimiento autónomo respecto al PSC

Ciutadans pel Canvi (CpC) aspira a consolidarse como movimiento autonómo respecto a los partidos, en particular el PSC, fiel a su objetivo fundacional de renovar las formas de gobernar y de hacer política. Siete meses después de concurrir a las elecciones en la candidatura de Pasqual Maragall, Ciutadans pel Canvi prepara para el día 27 de mayo su primera convención, en la que debatirán tres ponencias cuyos objetivos son apuntar nuevas formas de participación política, concretar la apuesta federalista y debatir sobre modelos y experiencias de desarrollo del bienestar social.

Desde su creación como movimiento impulsor de la candidatura de Pasqual Maragall a la presidencia de la Generalitat, Ciutadans pel Canvi ha estado sometido a una constante presión del partido socialista. Los dirigentes del PSC temen que CpC se consolide como un "partido bis" al que se afilíen quienes por una u otra razón no quieran formar parte de la organización del PSC.Estos dirigentes socialistas aceptaron a regañadientes que una tercera parte de la candidatura electoral de Maragall estuviera formada por miembros de CpC. Y desde entonces han presionado para que este movimiento se oriente a la integración dentro del PSC. El presidente del PSC, Raimon Obiols, pidió la semana pasada que las relaciones entre su partido y Ciutadans pel Canvi "se articulen mediante un protocolo" que fije las obligaciones de cada parte.

El diputado Josep Maria Vallès explicó ayer, en la presentación del programa de la convención, que Ciutadans pel Canvi "no quiere ser protagonista de nada, pero tampoco quiere hacer seguidismo ni ser apéndice ni satélite de nada". El vínculo entre el PSC y CpC es solamente, agregó, "el que deriva del programa electoral" y de formar parte del mismo grupo parlamentario.

Las pretensiones del PSC chocan además con la realidad orgánica de las plataformas de CpC. La mayoría de sus integrantes son independientes que quieren seguir siéndolo. Hay también una parte que está al mismo tiempo afiliada al PSC o simpatiza con él. Y luego otra parte que comparte afiliación con Iniciativa-Verds. Àlex Masllorens, miembro de la comisión permanente de CpC, explicó que el movimiento "se desharía" si se quisiera forzar su integración en el PSC.

En la campaña de las elecciones autonómicas de octubre pasado, CpC tuvo 6.000 afiliados y estableció contacto permanente 32.000 personas que solicitaron estar al corriente de sus actividades y propuestas. Ahora cuenta con 200 plataformas en las que participan 2.000 adheridos.

Vallès destacó que el cambio de mayoría de gobierno que CpC impulsó en las elecciones autonómicas "es un factor de renovación, pero no es suficiente". El objetivo de CpC es "renovar las formas de hacer política", insistió. Esto se refiere también al propio PSC. Vallès afirmó que los políticos "debieran estar menos encapsulados en su organización" y deberían "hacer más caso de la gente en sus propuestas concretas".

Masllorens explicó que el movimiento está en fase "expansiva", recibe unas 30 altas cada semana y ahora "puede plantearse ir más allá del apoyo a una persona y unas elecciones".

La convención del día 27 se celebrará en el Palau Sant Jordi y constará únicamente de la discusión de tres ponencias y un discurso de Maragall. Este proceso de debate se celebra separado del que semanas atrás decidió la composición de los organismos de coordinación de las plataformas que componen el movimiento.