Londres y Francfort se unen en la mayor Bolsa europea e invitan a Madrid y Milán
Las bolsas, como las empresas, también se están subiendo al carro de la mundialización vía fusiones. Ayer, las de Londres y Francfort anunciaron su unión para crear el mayor mercado bursátil europeo, con un volumen de negocio de 5,2 billones de euros (865 billones de pesetas, casi nueve veces el PIB español). A esta fusión se unirán en una segunda fase las bolsas de Madrid y Milán. El movimiento incluye, además, una alianza con el Nasdaq (que agrupa los valores tecnológicos en EE UU) para desarrollar un mercado de valores paneuropeos de alto crecimiento.
La macrobolsa, bautizada International Exchange (IX), controlará el 53% de todos los títulos europeos, que suman una capitalización de 4,7 billones de euros y que, según reconocen los máximos responsables de la fusión, cotizarán en la moneda única en un futuro no muy lejano.Con esta operación, los mercados de Londres y Francfort responden a Euronext, el proyecto de integración de las bolsas de París, Bruselas y Amsterdam, anunciado en marzo, que cuenta con un volumen de negocio de 1,4 billones de euros y una capitalización de 2,6 billones de euros.
El proyecto que se dio a conocer ayer es más ambicioso que el de sus competidores europeos, puesto que abre las puertas de par en par a la integración de los mercados de Madrid y Milán (con los que ya ha firmado un acuerdo de intenciones) y porque se completa con un pacto con el Nasdaq para formar un mercado de valores paneuropeos de alto crecimiento. A pesar de ello, los responsables de Euronext manifestaron ayer que la unión de Londres y Francfort es "menos completa" que la suya.
IX adoptará un sistema electrónico unificado -el Xetra, usado por la Bolsa de Francfort- , tendrá la sede central en Londres y su capital se repartirá al 50% entre ambos socios. El mercado de Londres acoge un conjunto de compañías tradicionales y de gran peso, las llamadas blue chips, que seguirán cotizando en libras esterlinas en su fase inicial.
Sin embrago, el objetivo de la macrobolsa europea, según se señala en el documento del acuerdo, es avanzar hacia una transacción "en euros de todos los valores europeos" siempre que el mercado lo demande. Una decisión que promete levantar polémica en el Reino Unido, donde los euroescépticos gozan de un notable respaldo.
"Nosotros no pondremos ningún obstáculo a este esquema", advirtió Werner Seiffert, director ejecutivo de la Bolsa de Francfort y de la nueva sociedad.
La presidencia será ocupada por Don Cruickshank, director del mercado londinense, quien en sus primeras declaraciones públicas hizo especial hincapié en la importancia de las negociaciones con las bolsas de Madrid y Milán.
Mientras los blue chips se trasladan a Londres, Francfort será el encargado de potenciar el mercado europeo de valores de alta tecnología y será la sede operativa de la alianza entre IX y el Nasdaq.
Con este segundo acuerdo, ambos socios previenen la creación de una filial europea del mercado de nuevas tecnologías estadounidense y avanzan juntos hacia el establecimiento de un mercado global de acciones de la nueva economía. Un planteamiento favorecidos por el entramado de relaciones que el Nasdaq ha urdido con sus homólogos en Japón, Hong Kong y Singapur.
