Barcelona tendrá un finalista español Moyà y Ferrero se enfrentarán en una semifinal, tras derrotar a Haas y a Ríos, respectivamente

El Godó tendrá un finalista español. No es una situación nueva, puesto que se ha producido siete veces en los últimos diez años, pero resulta un alivio tanto para los aficionados como para la organización. Los cuartos de final de ayer abrieron paso a uno de los duelos más esperados de este Godó: el enfrentamiento entre Carles Moyà y Juan Carlos Ferrero (15.00, La 2). Los dos resolvieron con solvencia sus respectivos partidos y se plantaron en las semifinales, habiendo cedido una sola manga en su trayectoria. Moyà se impuso al alemán Tommy Haas, 17º mundial, por 6-4, 6-4 en 1 hora y 15 minutos. Ferrero eliminó al chileno Marcelo Ríos (13º) por 6-3, 6-4 en 1 hora y 17 minutos. La otra semifinal enfrentará al ruso Marat Safin, que venció al ecuatoriano Nicolás Lapentti por 7-6, 7-5, y al ganador del partido entre Younes El Aynaoui y el sueco Magnus Norman que se jugará hoy a las doce tras haberse suspendido ayer por la lluvia ayer."Sí", confesó un sincero Moyà, "habrá un finalista español, e intentaré ser yo". Sus palabras sonaron a desafío contra un jugador, Ferrero, que se encuentra en uno de los mejores momentos de su corta carrera profesional. A sus 20 años, Ferrero es el tenista más emergente del circuito y uno de los que está despertando más expectativas de futuro. Por contra, Moyà, de 23 años, está concluyendo su fase de recuperación de una lesión en la espalda que le dejó fuera del circuito por más de seis meses. "¿Si será más duro que ante Haas? Respeto mucho a Ferrero", agregó el mallorquín. "Es difícil ganarle en tierra batida. Lo corre todo, tira fuerte de los dos lados y es muy peligroso. Pero yo voy a jugar de tú a tú desde el fondo, aplicando mi esquema de juego. Y si no funciona, deberé cambiar cosas".

La estadística aporta poco en este caso. Se han enfrentado dos veces, con un triunfo para cada uno. Moyà ganó el año pasado en la tercera ronda del Godó en tres complicadas mangas, acusando problemas en un dedo de la mano derecha. Ferrero se impuso en Scottsdale este año, cuando Moyà iniciaba su recuperación. Ahora, el levantino está en mejores condiciones físicas y mentales. Pero Moyà empieza a sentirse cómodo en la pista y, aunque algo lento en sus desplazamientos, está muy motivado y empieza a hacer daño. "Desde luego que prefiero enfrentarme a Moyà", dijo sin ninguna duda Ferrero en su conferencia de prensa antes de conocer el nombre de su rival. "Si jugamos bien será un cruce de dos drives bastante buenos. El que esté mejor ganará".

Tremenda motivación

Tanto Moyà como Ferrero hicieron un claro despliegue de sus armas en sus encuentros de cuartos de final. El mallorquín afirmó que había ganado el partido por su mayor solidez en el fondo de la pista y por la mayor eficacia de su drive. Sin embargo, la base fundamental en que construyó el edificio fue su servicio y su tremenda motivación. Hay un dato muy significativo: Moyà no afrontó ninguna bola de rotura de su saque en todo el partido; y, por contra, sólo dejó escapar un juego de los tres en que dispuso de break-points. Ganó el partido con dos roturas (una por manga). Y Haas, un excelente sacador semifinalista en Memphis este año, llegó a desesperarse tanto al comprobar su impotencia, que acabó rompiendo con sus propias manos una de sus raquetas.

Ferrero volvió a demostrar lo bien amueblada que tiene su cabeza en su partido contra Ríos. Mentalmente estuvo perfecto, casi tanto como en su juego. "Creo que hacerlo mejor ya es muy difícil", comentó el de Onteniente. "Mucho más no puedo dar. Lo único a lo que aspiro es a jugar así todos los partidos. ¡Pero eso ya sería la hostia!". El chileno, uno de los jugadores con más talento del circuito, fue dejando muestras de arte en el camino hacia su derrota. Pero como los grandes artistas que han pasado por el circuito profesional de tenis, todo lo deja en manos de su talento natural. Y eso a veces es excesivo. Trabaja poco y se nota en sus desplazamientos. Ese aspecto quedó en evidencia cuando el español le movió bien y le sacó de la pista con las aceleraciones de su drive. "Estar en las semifinales me motiva y me da confianza. Estoy llevando una buena trayectoria desde la Copa Davis. Y eso me anima a pensar que puedo hacerlo bien en los próximos Masters Series y en Roland Garros".