Núñez denuncia agravios comparativos
Josep Lluís Núñez, presidente del Barcelona, denunció ayer lo que, según él, constituyen agravios comparativos en el trato dispensado por la Federación Española de Fútbol y justificó la posición de su club de no disputar el partido de Copa ante el Atlético.Núñez declaró en la página web del club que la intención fue jugar la semifinal, pero precisó que la entidad "no estará nunca dispuesta a una parodia indigna de esta competición y del nombre que lleva". "Estoy totalmente de acuerdo con Ángel Villar, el presidente de la Federación Española, en el sentido de que se ha de dignificar la Copa del Rey, y la mejor manera de hacerlo es que todos los equipos acudan con sus mejores efectivos a los partidos y no como pasa en estas semifinales, en las que están ausentes diecisiete de las figuras más excepcionales de los cuatro equipos participantes", señala Núñez.
El presidente del Barcelona se quejó además de que a su club se le "obliga" a jugar con diez jugadores, en referencia a la alineación que presentó Van Gaal el pasado lunes.
"Si Villar quiere dignificar la Copa, que actúe de inmediato, ahora que todavía queda tiempo para salvar la competición", remarcó. Núñez insistió en que su club "quiso y quiere jugar" el partido. "Incluso propusimos que se nos permitiese alinear más jugadores del filial, y no sólo los tres reglamentarios, para completar el equipo, pero también nos lo negaron", añadió.
Explicaciones
"Lo que no hará nunca el Barcelona, por respeto al Rey y a las más elementales normas deportivas, es estar dispuesto a ofrecer un espectáculo ridículo alineando un portero como delantero centro, que es lo que tendríamos que haber hecho, algo que supone una burla a los aficionados al fútbol cuando hay fechas hábiles en el calendario, como es la del 16 de mayo". El presidente barcelonista insiste en que "nadie ha dado todavía una explicación convincente de los motivos por los que no se puede disputar esta semifinal el 16 o 17 de mayo".
"Tenemos el derecho a competir en igualdad de condiciones con los rivales y a que se nos ofrezca otra fecha del calendario, como se hizo en su día con los dos equipos de la capital, que tampoco podían disputar sus encuentros por falta de jugadores, uno (Real Madrid) por disputar una competición en otro continente -Mundialito- y otro (Atlético) por indisposición de algunos de sus futbolistas".
Núñez criticaba así la eliminatoria de Copa de la que quedaron exentos los madridistas y al encuentro que se le aplazó al Atlético en 1997 por enfermedad de diez jugadores. "No es admisible que haya benevolencia y comprensión para unos, y con nosotros haya intransigencia, rigor y amenazas", concluye el presidente del Barcelona.
