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Directivos de Telefónica promueven una Superliga europea con 16 equipos

Varios grupos audiovisuales estudian la propuesta que han recibido para la creación de una Superliga europea cerrada con 16 equipos, según publicó ayer el diario As. La iniciativa está siendo impulsada por Telefónica, a partir de un informe elaborado por Carlos García Pardo, ex presidente de la empresa Dorna. Dicho informe ya ha sido presentado a varios clubes de fútbol, algunos grupos audiovisuales y a la UEFA. El proyecto, que incluiría al Madrid, el Barça y previsiblemente al Valencia, garantizaría 6.000 millones a cada participante y 22.000 al ganador.

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Los clubes expresan su escepticismo

Fuentes de Telefónica explicaron que el proyecto de una Superliga europea, de carácter cerrado, a la manera de la NBA, le fue presentado a los directivos de su filial Telefónica Media por el financiero Arturo Baldasano hace poco más de un mes. La iniciativa partió, sin embargo, de Carlos García Pardo, ex propietario de la firma de promoción deportiva Dorna, que eligió a Baldasano, ex presidente de Telefónica Media, para hacer llegar el proyecto a la empresa que preside Juan Villalonga. La intención de los promotores es comenzar con la competición en septiembre. Los clubes consultados por este periódico consideran inviable un arranque tan apresurado de la competición.

El plan de la Superliga ha sido comunicado a una buena parte de los clubes integrados en el denominado G-14, que agrupa a los principales equipos europeos. El Real Madrid ha mantenido reuniones con los promotores de la idea. En Italia, han recibido información el Milan, Juventus, Inter y Lazio. El viernes pasado se establecieron contactos con el Barcelona. Ayer se entregó el informe a los equipos ingleses: Manchester United y Liverpool. A estos dos, se uniría el Arsenal. El Ajax de Amsterdam también ha tenido conocimiento de la propuesta.

Telefónica Media reconoce que está interesada en llevar adelante la iniciativa, siempre y cuando cuente con el apoyo de la UEFA y de los clubes de fútbol a los que se le ha propuesto. "Telefónica tiene ánimo de liderar el proyecto porque ofrece una buena oportunidad, pero no lo vamos a llevar a cabo solos", afirman fuentes de la compañía.

Según fuentes de la operadora, el proyecto se ha presentado ya a varias cadenas de televisión de pago, entre ellas las vinculadas al británico Rupert Murdoch, al alemán Leo Kirch y a la sociedad francesa Canal+. La iniciativa está abierta, según señalaron dichas fuentes, a todas las plataformas de televisión de pago, pay per view e Internet que se quieran sumar.

Por el momento, el proyecto lo conocen Real Madrid y Barcelona y se pretende incluir a un tercer club. En principio, el interés de los promotores pasa por invitar al Valencia.

El papel de la UEFA

Esas mismas fuentes aseguran que el proyecto se ha presentado también a la UEFA porque se considera imprescindible su participación para garantizar la organización del campeonato.

El proyecto contempla que las cadenas de televisión constituyan una sociedad conjunta que se ocuparía de explotar los derechos de transmisión de los partidos, así como la publicidad (dentro y fuera de los estadios donde se celebren los encuentros) y todo aquello que tenga que ver con la explotación de la imagen del campeonato (merchandising).

Los promotores de la iniciativa han propuesto incluir a 16 equipos, aquellos que tienen mayor tirón televisivo, según las cifras que registra el pago por visión en cada país. La competición tendría 32 partidos en una primera fase y luego, un play-off entre los cuatro u ocho primeros. La bolsa total a repartir entre los 16 equipos superaría los 100.000 millones de pesetas. Al ganador del campeonato se le premiaría con unos 22.000 millones de pesetas y al último clasificado se le garantizaría un mínimo de 6.000 millones de pesetas. En la actual Liga de Campeones europeos que organiza la UEFA el premio para el ganador es de 4.500 millones. Con el formato actual de la Liga de Campeones, la UEFA reparte 80.000 millones de pesetas entre los 32 clubes que participan en la fase final, que comienza en septiembre en forma de liguilla con ocho grupos de cuatro equipos.

Entre las condiciones que se prentende introducir está la exigencia de que los equipos participantes cuenten con dos plantillas distintas. Una para participar en la competición europea y otra para disputar sus ligas nacionales. De esa forma, explican los promotores, se garantiza el espectáculo de la competición multinacional y se promueve el desarrollo de la cantera.

Una similar inciativa anterior fue promovida por MediaPartners y el banco de inversiones Merrill Lynch, pero fracasó por la resistencia de la UEFA, que amenazó incluso con expulsar de su órbita a los clubes que dieran un paso sin su manto. Sin embargo, aquella propuesta sirvió para agrupar a los principales equipos europeos en el G-14 y a revisar al alza la cuantía de los premios que la UEFA ofreció a todos los participantes en la Liga de Campeones.

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