Mas sólo gastó el 2,5% asignado a accesibilidad para discapacitados

La eliminación de los obstáculos físicos para la población discapacitada no es una prioridad para el Consell, al menos, de acuerdo con el gasto ejecutado por la Consejeria de Bienestar Social durante el ejercicio de 1999, que alcanza el 2,48% del presupuestado. El departamento que dirige Carmen Mas desde julio pasado presupuestó el año pasado 205 millones para este fin. De esta cantidad únicamente ha gastado poco más de cinco millones de pesetas, según ha denuniciado el diputado del Grupo Socialista en las Cortes, Antonio Torres. De los 80 millones de pesetas destinados a un programa de mejora de accesibilidad al medio físico del presupuesto de 1999, sólo se gastaron 4,1 millones -de 19 proyectos se realizaron tres-. De igual forma, un convenio sobre la misma área con la Organización Nacional de Ciegos de 25 millones se redujo a 6,1 millones, de los que sólo se gastó un millon finalmente. El tercer programa, y más importante, de adecuación a la ley de accesibilidad, elaborada por el propio PP, dotado con 100 millones de pesetas tuvo peor destino que los anteriores: no se destinó a su ejecución ni una peseta.

Torres denunció ayer la falta de ayudas del Consell, que, señaló, no sólo implica la escasez de programas autonómicos, sino municipales, financiados de los anteriores.