El PSC exige que el Parlament nombre a los miembros del Consejo del Audiovisual

Los socialistas dieron ayer un giro de última hora en la ponencia parlamentaria que prepara la reforma del Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC). Abandonaron la línea de consenso que había presidido la elaboración del proyecto de ley y anunciaron que presentarán un voto particular con sus propuestas máximas: que los miembros del CAC sean nombrados por el Parlament sin intervención del Gobierno catalán y que entre las funciones del CAC se incluya la concesión de las licencias de radio y televisión, que hasta ahora otorga el Gobierno.

Los socialistas rechazaron ayer la última propuesta que había presentado CiU para la elección de los nueve miembros del CAC. La fórmula era la siguiente: El Parlament designaría, por una mayoría de dos tercios, a cinco miembros del CAC y el Gobierno catalán a tres. Después, estos ocho integrantes del CAC nombrarían al noveno, que sería el presidente, a propuesta del Gobierno catalán.El otro punto del proyecto sobre el que el ponente socialista, el diputado Josep Maria Carbonell, anunció que no había acuerdo es el que determina la intervención del CAC en la concesión de frecuencias de radio y televisión. La fórmula a la que se había llegado preveía que el CAC intervendría en dos momentos del proceso, mediante la presentación de sendos informes preceptivos: sobre la determinación de las condiciones del concurso de concesión y sobre la solicitudes presentadas por los aspirantes a las concesiones.

Los miembros de la ponencia tenían previsto terminar hoy sus trabajos, al cerrar precisamente la negociación sobre los dos puntos del proyecto sobre los que el PSC anunció ayer que mantiene sus posiciones iniciales. La intención de los ponentes era acelerar los trámites del proyecto en comisión de manera que pudiera ser sometido al pleno del Parlament del día 26 de abril o en el primero de los del mes de mayo.

La posición adoptada por el PSC provocó una gran decepción en CiU. El diputado convergente Francesc Codina explicó que su grupo parlamentario y el Gobierno catalán han hecho un notable esfuerzo de aproximación cuyo resultado es, aseguró, la configuración de un CAC con todos los atributos para ser independiente. Codina afirmó que el giro dado por el PSC, que atribuyó a la voluntad de Pasqual Maragall de marcar distancias con CiU, "dificultará" que pueda alcanzarse el consenso en la reforma de la ley de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), que engloba a la radiotelevisión de la Generalitat.

Los diputados Josep Bargalló, de Esquerra Republicana (ERC), y Dolors Comas, de Iniciativa-Verds (IC-V), manifestaron su intención de apoyar el texto de la ponencia, porque acoge sus posiciones de forma "suficiente" como para no rechazarlo. Ambos expresaron su temor de que el abandono del consenso anunciado ayer por el PSC "deje en manos de CiU y PP la reforma de la ley de la CCRTV", que, a su juicio, es tanto o más importante que la reforma del CAC.

Colegio de Periodistas

El Colegio de Periodistas de Cataluña pidió ayer que no haya "marcha atrás" en las posiciones sobre la reforma del CAC que habían asumido la izquierda y el PP en los dos puntos que considera clave: la independencia del CAC respecto del Gobierno y la atribución al CAC de la concesión de las frecuencias de radio y televisión. El Colegio de Periodistas reclama que todos los miembros del CAC sean elegidos por el Parlamento por una mayoría de dos tercios, para garantizar su independencia del Gobierno. En sentido análogo se había pronunciado anteayer el Sindicato de Periodistas de Cataluña (SPC).

En los medios políticos y profesionales que siguen de cerca esta cuestión se ha adelantado el nombre del periodista y profesor universitario Josep Gifreu como posible presidente del CAC tras la reforma.

Por otra parte, el alcalde de Barcelona, Joan Clos, ha planteado a los grupos de la oposición municipal dos opciones para reformar también el modelo de gestión y control de Barcelona Televisió (BTV).