El Gobierno considera que en otoño habrá elecciones vascas anticipadas

El Gobierno central trabaja en la hipótesis de un adelanto de las elecciones autonómicas vascas para el otoño. A la espera de que se pronuncie, La Moncloa cree que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, no tiene margen de maniobra para gobernar más allá, dado que carece de mayoría para aprobar los presupuestos. El Ejecutivo también prevé una dura ofensiva de ETA tras el abandono por parte de EH del Parlamento vasco, ya que "se cumplirá el axioma de la banda de sustituir con el terrorismo la ausencia política".

El Gobierno ha comprendido que su hipótesis de un horizonte político despejado de comicios en tres años es ilusoria: el bloqueo al que se ve abocado Juan José Ibarretxe, en minoría en el Parlamento vasco -27 escaños de 75- tiene difícil salida.La Moncloa calcula que el primer intento de Ibarretxe y el PNV para salir del atolladero será arrancar una nueva tregua a ETA, pero ve muy díficil que la banda la considere porque el enfrentamiento entre ella y HB con el PNV es profundo. Así, cree que se asiste a una lucha por la hegemonía en el nacionalismo en la que los terroristas y su brazo político juegan fuerte contra los peneuvistas. En esas condiciones, ve muy problemático que la banda reconsidere su actitud, declare otro alto el fuego y permita a EH volver a la Cámara y apoyar a Ibarretxe.

El Ejecutivo estima que, si se confirma este fracaso, el siguiente paso de Ibarretxe y el PNV será tratar de lograr el respaldo del PSE para tratar de recomponer su mayoría parlamentaria. Pero también ve muy difícil esta salida por la actitud adoptada por los socialistas tras el 12-M.

El secretario general del PSE, Nicolás Redondo Terreros, ha dicho que no le basta la ruptura del PNV con Lizarra para recomponer su relación. Exige su regreso al Estatuto de Gernika. Los propios socialistas reconocen que es muy difícil que el PNV lo haga porque tendría que revisar drásticamente el soberanismo consagrado en su asamblea de enero y sólo sería posible tras pasar por las urnas.

Así, La Moncloa concluye que la hipótesis más probable es la anticipación de las elecciones por parte de Ibarretxe al otoño.

El Gobierno prevé también una fuerte ofensiva de ETA. "ETA y HB funcionan como vasos comunicantes. Cuando HB abandona la política, como acaba de hacer con su retirada del Parlamento, ETA recobra protagonismo", recordaban ayer fuentes gubernamentales.

Esta previsión empujará a José María Aznar a mantener a Jaime Mayor y su equipo de Interior, en el inminente cambio del Gabinete, por sus éxitos en la lucha antiterrorista y para que ek ministro se prepare para competir por la presidencia de Euskadi, ya que se piensa que su tirón es enorme. Aznar quiere batir al nacionalismo vasco en su terreno.

El Ejecutivo cree que sólo una nueva derrota en las urnas empujará al PNV a abandonar el soberanismo y regresar al Estatuto. Si los votos se lo permitieran, Mayor impulsaría entonces su proyecto de "Gobierno compartido" con el PSE y el PNV-EA.