Aznar prepara con Rodrigo Rato la estructura del nuevo Gobierno
El presidente del Gobierno en funciones, José María Aznar, prepara con su vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, el diseño administrativo del nuevo Gobierno, que dará a conocer una vez que culmine su debate de investidura el 26 de abril. Rato tiene asegurada la continuidad en el Ejecutivo en su calidad de responsable del área económica que conllevará, con casi toda probabilidad, una vicepresidencia como hasta ahora. Fuentes gubernamentales aseguran que Rato desechó hace semanas la posibilidad de ocupar la cartera de Exteriores, con mayores competencias procedentes del área económica, como el Comercio Exterior, o de la cultural, como el Instituto Cervantes. Rato ha alegado razones familiares para desechar esa función, según aseguran las mismas fuentes.
Una consecuencia derivada de la probable continuidad de Rato como vicepresidente será el mantenimiento de la otra vicepresidencia, la política, que en la legislatura ya finalizada ocupó Francisco Álvarez Cascos. Con el mantenimiento de la vicepresidencia política, Aznar, según sus próximos, tratará de evitar que Rato quede señalado como sucesor a la Presidencia del Gobierno ante la opinión pública. "De otro modo, Rato se vería sometido a un fuerte desgaste tanto interno como externo y Aznar tratará de protegerlo", señalan las fuentes consultadas.
Presidencia y portavocía
Para esa vicepresidencia política - cuyo diseño se desconoce, pero que podría llevar aparejada, además del Ministerio de la Presidencia la Portavocía del Gobierno- se baraja como candidato a Mariano Rajoy, ministro de Educación y Cultura en funciones.
El nombre de Jaime Mayor, titular de Interior en funciones, ha perdido posiciones para optar a ese puesto ante la creciente gravedad de la crisis política del País Vasco. Del mismo modo, se baraja que Rafael Arias-Salgado, ministro de Fomento en funciones, podría ocupar Exteriores, que abandonará Abel Matutes.
El equilibrio territorial será otra de las claves de Aznar en la formación de su Gobierno y de la que menos se habla. En el actual ha habido un reparto de vascos, catalanes, gallegos, andaluces, castellanos. La cuota catalana la tiene cubierta con Josep Piqué, al que se le asigna la nueva cartera de Innovación, que sustituye a Industria.
Pero tras la salida del Gobierno de Javier Arenas y de Manuel Pimentel tendrá que cubrir la cuota andaluza. Ahí apuntan las posibilidades de la actual alcaldesa de Málaga, Celia Villalobos, que podría ocupar una cartera como Trabajo y Asuntos Sociales. La cuota femenina puede completarse con candidatas como la balear Rosa Estarás, la secretaria de Estado Elena Pisonero y Concepción Dancausa, actual directora del Instituto de la Mujer, según las especulaciones gubernamentales, para ocupar carteras como Medio Ambiente, Agricultura o Educación y Cultura.
La cuota castellana la puede cubrir Aznar con Juan Carlos Aparicio, en Sanidad y Seguridad Social, elevada al rango de ministerio, y con Ángel Acebes, candidato a seguir en Administraciones Públicas. Aznar también debe atender compromisos políticos y en este capítulo se especula con que el ex presidente del Congreso, Federico Trillo, asuma Justicia. Fomento la podría ocupar Álvarez Cascos y en Defensa puede haber sorpresa, como hace cuatro años.
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