Blasco afirma que hacen falta 4.000 inmigrantes para cubrir la demanda de mano de obra. Los sindicatos dicen que Blasco se queda corto porque habrá 20.000 peticiones de regularización

La Comunidad necesita, según el consejero de Empleo, Rafael Blasco, regularizar la situación de 4.000 inmigrantes para satisfacer la demanda de mano de obra de los empresarios en los dos próximos años. Blasco apuntó ayer en Castellón hacia sectores como el de hostelería, construcción, cerámica y agricultura como los más necesitados de trabajadores extranjeros. Los sindicatos calificaron ayer la previsión del consejero de "insuficiente".

Blasco, que ayer presentó en Castellón el Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Servef), explicó que sólo esta provincia necesitaría entre 700 y 1.000 trabajadores inmigrantes para paliar la falta de mano de obra. Para ello haría falta regularizar su situación, cuestión de la que ya se encarga el Gobierno central, y que recibieran formación ocupacional, una necesidad que impulsa su propio departamento.Blasco defendió que el marco jurídico español es más "moderno" que el de otros países europeos. Su consejería ha detectado un importante flujo de inmigrantes debido al buen momento económico de la Comunidad, por lo que se podría "suplir la escasez de mano de obra existente". "En Castellón", puso como ejemplo, "con una tasa de desempleo del 5,3% respecto a la población activa se vive una situación, prácticamente, de pleno empleo".

El consejero puntualizó, no obstante, que deberían tenerse en cuenta en dicho proceso de incorporación de extrajeros al mercado laboral las bolsas de parados existentes en Valencia y Alicante.

El consejero estima "alto" el nivel de interlocución con los agentes sociales en el tema de la integración de los inmigrantes. Según Blasco, su departamento "incentiva las líneas de formación ocupacional a la carta". Con ello se consigue dirigir a los trabajadores extranjeros hacia los sectores más necesitados de puestos de trabajo cualificados.

Los sindicatos recibieron ayer las palabras de Blasco con críticas. El abogado del Centro de Información de Trabajadores Migrantes de CC OO, Javier Botey, dijo que el consejero de Empleo se quedó ayer "corto" en sus previsiones, dado que el propio delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Carlos González Cepeda, cifraba en 20.000 las solicitudes de regularización de inmigrantes que se esperan para este año en el proceso que se encuentra actualmente abierto en todo el Estado.

El portavoz de Empleo de UGT, José Fons, abordaba las declaraciones de Blasco desde otro punto de vista. "Es abril y la Consejería de Empleo no ha puesto todavía en marcha el plan de formación de este año", dijo en alusión al ofrecimiento de formación ocupacional hecho ayer por Blasco al colectivo de inmigrantes. "En lugar de declaraciones grandilocuentes, sería mejor que Blasco aprobase el plan de este año", reiteró Fons.

"Chiste" del consejero

En una línea muy similar se expresó el responsable de inmigración del mismo sindicato. Mohamed Amin habló de "chiste" al referirse a las manifestaciones vertidas por Blasco. "Entre los inmigrantes hay pocos ingenieros y médicos", señaló Amin. El responsable de inmigración de UGT destacó que el 60% de los extranjeros que trabajan en la Comunidad lo hacen en la recolección de cítricos. Detrás de ellos, el grupo más numeroso está empleado en el servicio doméstico, señaló, parcelas en las que "no se necesita ninguna cualificación"

No fue la formación el único aspecto que criticó UGT. Amin censuró que el consejero de Empleo hablara de 4.000 trabajadores en dos años sin consultar con los agentes sociales. En todo caso, en opinión del representante sindical serían más de 4.000 los empleos que necesitarían de mano de obra extranjera y siempre ocupando puestos de trabajo "que no quieren ocupar los trabajadores autóctonos".