CiU anuncia que descarta votar a favor de la investidura de José María Aznar

VIENE DE LA PÁGINA 1 Arenas precisó que la negociación de hoy se circunscribirá a conseguir el voto afirmativo de los nacionalistas en el debate de investidura, por lo que "todo lo demás queda aplazado sine die hasta después de la investidura", precisó. El PP pondrá sobre la mesa sus seis prioridades de gobierno, que en el ámbito de política general (salvo en lo referente a la amplitud de las demandas de carácter nacionalista) coinciden plenamente con las 12 condiciones expuestas por CiU durante la campaña electoral.

La coalición también está dispuesta a negociar el decreto de Humanidades, que el PP ya ha anunciado que piensa aprobar en esta legislatura, pero consensuando su contenido. "Un buen punto de partida serían las conclusiones adoptadas por la comisión que presidió Díaz-Ambrona [Juan Antonio Ortega Díaz-Ambrona, ex ministro de Educación en el Gobierno de UCD]", afirmó un dirigente de CiU.

A pesar de las diferencias, ambas formaciones mantienen una actitud abierta al diálogo. Muestra de ello es la composición al más alto nivel de las delegaciones. Por parte del PP participarán Javier Arenas, Rodrigo Rato y Mariano Rajoy.

Debate de presupuestos

Fuentes de la coalición señalaron que, en ningún caso, van a condicionar su voto a la investitudura de Aznar con la aprobación de los presupuestos de la Generalitat. "No es de recibo", subrayaron. Pese a esta advertencia, el consejero de Economía y Finanzas, Artur Mas, señaló ayer en rueda de prensa que la oferta de diálogo lanzada por el PP en Madrid tendría que traducirse en Cataluña con su voto afirmativo a los presupuestos. "Las palabras deben traducirse en hechos", declaró en rueda de prensa.

Mas iniciará mañana la negociación de los presupuestos con una delegación del PP de Cataluña y el viernes lo hará con otra de Esquerra Republicana. El consejero ha mantenido diversos contactos telefónicos esta semana con el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod. Los nacionalistas aspiran a repetir la opción que favoreció la investidura de Pujol: el apoyo de los conservadores y la abstención de Esquerra.

Por su parte, el vicesecretario general de ERC, Josep Huguet, reiteró su interés en sacar adelante los presupuestos mediante un acuerdo tripartido entre su formación, los socialistas y CiU, opción ya descartada ayer por Mas. Pese a ello, Esquerra está dispuesta a dialogar con los nacionalistas pero pondrán como condición previa que los presupuestos contengan la partida correspondiente para financiar los acuerdos que alcanzaron para la investidura de Pujol. Es decir, la creación de 6.000 plazas de guarderías para este año; 2.000 millones para la dinamización del comercio minorista, y una dotación para el Instituto de Industrias Culturales y para desplegar la Ley de Unidades Familiares.

El consejero descartó negociar con el PSC e Iniciativa pero mantendrá con estas dos formaciones una reunión informativa la próxima semana.

Los presupuestos para este año, que serán aprobados el lunes por el Consell Executiu, darán prioridad a las políticas en materia de sanidad, enseñanza y bienestar social, en concreto a las ayudas a las familias con hijos de entre uno y tres años. Mas anunció que la previsión es reducir el déficit de la Generalitat en unos 11.254 millones de pesetas y conseguir el equilibrio presupuestario en el año 2002.