El PSE anuncia con rotundidad que no apoyará al PNV en el Gobierno mientras siga en Lizarra

El lehendakari Juan José Ibarretxe anunció ayer que va a iniciar un proceso de diálogo con los partidos políticos para buscar una mayoría parlamentaria que sustente al Gobierno, tras la ruptura del pacto con EH. Sin embargo, el socio con mayores posibilidades, el PSE, ha descartado apoyar al Gabinete en minoría del PNV y EA, mientras ambos partidos no rompan con Lizarra. El portavoz, Josu Jon Imaz, concretó que el plazo acabará en julio y que invitarán a todos los partidos, aunque descartó cualquier acuerdo con EH en tanto que no condene sin paliativos la violencia.

El secretario general del PSE-EE, Nicolás Redondo, fue ayer rotundo al asegurar que su partido continuará ejerciendo un papel de oposición en el Parlamento vasco, y descartó cualquier acuerdo con el PNV y EA para garantizar la estabilidad del Gobierno en minoría de Ibarretxe. Aunque Redondo se mostró partidario de la colaboración entre nacionalistas y no nacionalistas, lo consideró imposible mientras PNV y EA "no superan Estella, abandonen su estrategia soberanista y vuelvan a defender el Estatuto de Gernika, además de desactivar la asamblea de municipios Udalbiltza". Redondo quiso dejar muy claro que "en este terreno no tenemos ninguna duda y seguiremos en la oposición" ante un Gobierno que "está sirviendo más a los intereses del PNV y el Pacto de Estella que a los ciudadanos". El diputado electo del PSE-EE por Alava, Ramón Jáuregui, coincidió plenamente con Redondo: "No veo ninguna posibilidad de entendimiento con el PNV en las claves de Lizarra", porque esos parámentros, dijo, "son incompatibles con una concepción democrática, con los principios en los que yo me sitúo como vasco para construir nuestro país".

Ante este panorama, el portavoz del Gobierno dijo por la tarde que el Ejecutivo contempla "sin dramatismo" la situación de minoría parlamentaria, ya que las normas básicas para su funcionamiento, es decir, los presupuestos, ya están aprobados y "ese hecho nos da cierta tranquilidad". Sin embargo la posibilidad de encontrar apoyos se presenta hoy casi imposible, ya que el PP no sólo excluye colaborar con el Gobierno nacionalista, sino que rehusó acudir a la última ronda de contactos convocada por el lehendakari en protesta porque Ibarretxe únicamente "dejó en suspenso" su pacto parlamentario con EH tras las primeras acciones de ETA.

"Todo abierto"

La convocatoria de elecciones anticipadas es "lo único que descartamos en este momento. Lo demás está todo abierto", dijo el portavoz del Gobierno tras la reunión del Consejo de Gobierno de ayer. Imaz explicó que Ibarretxe llamará a todos los partidos, pero precisó que no podrá reeditarse el pacto con EH, mientras la formación de Otegi no muestre "actitudes claras de rechazo de la violencia". Tampoco aclaró qué escenario maneja para el caso de que no consiga nuevos apoyos en el Parlamento para el verano.

En declaraciones a Radio Euskadi, Juan José Ibarretxe, reconoció que "es mejor gobernar desde una estabilidad de las instituciones" y, a pesar de las dificultades objetivas, se mostró optimista. Los apoyos, según dijo, "van a venir dados de los propios mecanismos de diálogo, de los propios planteamientos que tengamos unos y otros en los próximos meses". Ibarretxe no sólo admitiría un acuerdo global de legislatura, sino que sondeará a los partidos si están dispuestos a apoyos puntuales para los próximos presupuestos.

En ese contexto, Ibarretxe hizo un llamamiento a la responsabilidad de los dirigentes políticos, "empezando por el propio lehendakari". "Tenemos que reflexionar, tenemos que hablar, pero sobre todo tenemos que trasladar a la sociedad mensajes positivos".