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Elecciones 2000

El PSC propone un frente catalán para negociar con el Gobierno central los temas autonómicos

Los socialistas catalanes ofrecieron ayer al resto de formaciones políticas, a excepción del Partido Popular, un gran pacto político en Cataluña para negociar con más fuerza en Madrid los temas clave de la autonomía, como el incremento del autogobierno y la mejora del sistema de financiación. Para el primer secretario del PSC, Narcís Serra, la pérdida de influencia de Convergència i Unió (CiU) tras la mayoría absoluta del PP requiere formar un gran bloque en Cataluña. Iniciativa per Cataluña-Verds realizó similar llamamiento para frenar el "españolismo".

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Los socialistas creen que se ha abierto una nueva etapa política que supone el fin de las constantes contrapartidas entre Convergència i Unió y el Partido Popular porque ambos se necesitaban parlamentariamente en Cataluña y en Madrid. "El intercambio de favores se ha acabado", proclamó Serra. Esta nueva coyuntura debería contrarrestarse desde Cataluña con la propuesta de Pasqual Maragall, es decir, un pacto de gobierno entre las diversas fuerzas políticas para la defensa del autogobierno con "claridad, rigor y lealtad al resto de España y ante el Gobierno español", declaró.Este gran pacto, que incluiría a Convergència i Unió, Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalunya-Verds, sería clave para negociar con más fuerza en Madrid los temas que afectan al autogobierno: el incremento del techo competencial, la mejora del modelo de financiación y frenar el descenso de competitividad de Cataluña.

No obtante, Serra reclamó primero de Jordi Pujol que explique cuáles son sus preferencias políticas para gobernar en Cataluña, es decir, si se inclina por el Partido Popular u opta por otras fórmulas, como por ejemplo Esquerra Republicana. El PSC e IC-V han presentado sendas preguntas parlamentarias en este sentido para que el presidente de la Generalitat las conteste en el pleno de hoy.

La propuesta del PSC consiguió el apoyo ayer de sus socios electorales de Iniciativa per Catalunya-Verds. El presidente de la coalición ecosocialista, Rafael Ribó, apostó por esta fórmula para hacer frente al "españolismo más militante" de un PP con mayoría absoluta en el Congreso.

"Ha llegado el momento de dejarse de monsergas", declaró Ribó, "y hay que buscar el consenso de todos los partidos para recuperar el espíritu unitario" de las reclamaciones nacionalistas. Aunque no excluyó directamente al PP de este frente parlamentario, el dirigente de IC-V se mostró escéptico respecto a que los conservadores defiendan el incremento sustancial del autogobierno y otro sistema de financiación.

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Rafael Ribó se reafirmó en sus críticas a la propuesta del Ejecutivo tripartito formulada por Esquerra Republicana que calificó de anacrónica. "Está fuera de lugar", señaló.

Por su parte, el vicesecretario general de los independentistas, Josep Huguet, anunció que solicitará una entrevista con Pasqual Maragall y Jordi Pujol para proponerles un frente "neoconstituyente" para pactar los asuntos clave de la autonomía catalana: financiación, reforma del Estatuto y política social.

"Hay que obligar al PP a mover ficha si no se quiere que haya un nuevo frente de desestabilización como en el País Vasco", manifestó Huguet. "La única cosa que puede dar miedo al PP es que, al margen de la violencia, haya una apuesta por la línea soberanista y se abra un foco de movilización", añadió.

El dirigente de ERC se mostró convencido de que Convergència i Unió apostará por mantener una línea de colaboración con los conservadores tanto en el Congreso como en el Parlament.

Arduino Vannucchi

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