Puntualizaciones

En casi cincuenta años que llevo dedicado a la producción cinematográfica he procurado respetar las opiniones que se han vertido en las críticas sobre las películas en las que he intervenido. Pero las descalificaciones personales y errores de bulto que se vierten en la crítica de la película Jara, publicada en el suplemento El Espectador del domingo 27 de febrero me llevan a realizar una serie de puntualizaciones, para que sus lectores no estén desinformados.Al final del franquismo, como se dice en la crítica, produje bastantes comedias, pero también fui el productor de películas dirigidas por Pedro Olea, Lautaro Murúa, Gonzalo Suárez, Javier Aguirre y José María Forqué, que no eran comedias. Escribe el crítico que en los ochenta no produje. Le hubiera bastado consultar alguna base de datos para descubrir hasta 16 películas en las que intervine en la producción. En los noventa produje películas dirigidas por Fernando Fernán-Goméz, Josefina Molina, Manuel Matji, Jaime de Armiñán y los noveles Fernando Cámara y David Alonso, que al crítico se le antojan palos de ciego.

A estas alturas todo el mundo sabe el alto componente de subjetivismo que en la mayoría de los casos encierra la crítica cinematográfica. Pero me permito llamar la atención sobre la responsabilidad de su periódico con sus muchos lectores a la hora de publicar un comentario que objetivamente contiene fallos de documentación y cuyo estilo insultante excede el terreno del análisis cinematográfico.- Luis Méndez Amago. Madrid