Un testigo del 'caso Zabaleta' identifica a Ricardo Guerra como el rapado que golpeó a la víctima

Iker Urruzola, seguidor de la Real Sociedad, identificó ayer a Ricardo Guerra, en el juicio que se celebra en la Audiencia de Madrid por el asesinato del hincha del equipo donostiarra Aitor Zabaleta, como la persona que golpeó a la víctima y le rompió la chistera a la salida del bar El Parador, próximo al estadio Vicente Calderón. Urruzola, tras mirar de frente al acusado, aseguró que, aunque su aspecto había cambiado, era la misma persona que agredió a Aitor minutos antes de que éste fuese asesinado al lado del estadio, a unos 100 metros del citado bar. Este testimonio es el primero desde que se inició el juicio que apunta a Guerra como participante directo en la cadena de agresiones que sufrió en Madrid -el 8 de diciembre de 1998, fecha del asesinato- un grupo de aficionados de la Real Sociedad.Los atacantes pertenecían al grupúsculo neonazi Bastión, la sección más radical del llamado Frente Atlético. El crimen se produjo horas antes del partido que enfrentó en el Vicente Calderón al Atlético de Madrid y la Real Sociedad. Urruzola subrayó que vio a Guerra pegando a Aitor, pero matizó que no vio el posterior apuñalamiento ni a la persona que lo ejecutó. También precisó que, cuando huía del bar junto a otros seguidores de su equipo perseguidos por los ultras, observó a un grupo de rapados que agredía a un aficionado de la Real que estaba tirado en el suelo, pero no pudo ver si entre ellos estaba Ricardo Guerra.

En la fase de instrucción, Urruzola también identificó a Guerra, durante una rueda de reconocimiento, como la persona que golpeó a Aitor a la salida del bar. Ese día Guerra estaba sin perilla (se la afeitó al día siguiente del crimen) y marcado con el número tres. "¿El número tres tenía perilla?", preguntó Urruzola a la instructora. "Sí", contestó ésta. "Pues es ése", replico el testigo.

El Movimiento contra la Intolerancia avanzó ayer que pedirá al tribunal que deduzca testimonio contra otras tres amigos de Guerra "por cooperación necesaria" en el asesinato de Aitor Zabaleta.