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La tasa de paro en mujeres menores de 25 años es un 10% superior a la de los hombres

Ser mujer o tener entre 16 y 30 años son dos de las principales trabas que obstaculizan el acceso al mercado laboral. La suma de ambas implica sueldos más bajos y mayor dificultad en alcanzar un lugar de trabajo estable que los hombres, una elevada probabilidad de incorporarse a reservas de empleo femenino, así como la garantía de alargar la jornada laboral con trabajo doméstico, según la guía de inserción laboral para mujeres jóvenes que ayer presentó Comisiones Obreras. El sindicato señaló que la tasa de paro para las menores de 25 años es del 33%, frente al 22% de los hombres.

A pesar de los "logros introducidos en la sociedad", según recoge la guía elaborada por las secretarías de juventud y de la mujer de CC OO, con un mismo nivel de formación, un hombre joven siempre tendrá más facilidad de encontrar un puesto de trabajo que una mujer. El estudio aporta cifras que apuntalan este argumento. A una tasa de paro del 22% en hombres menores de 25 años, la cifra se dispara al 33% en el caso de las jóvenes. Una distancia similar separa a los menores de 25 años que tienen un contrato con una empresa. La tasa de empleo masculino es del 40,% frente al 31,7% de las jóvenes -una cifra que "se asemeja a la tasa de empleo de las mujeres mayores", lo que hace "más patente" la desigualdad entre hombres y mujeres-. Y ello pese a que las cifras de quienes se encuentran activos, es decir aquellos que trabajan o buscan un empleo, es similar en hombres y mujeres: 52% y 47%, respectivamente. La dificultad de encontrar trabajo para las jóvenes adquiere mayor relieve si se considera que las mayores tasas de actividad se dan entre las solteras con estudios medios y superiores. La radiografía del sector laboral femenino se completa con aspectos como la "segregación laboral que sufren las mujeres. El 80% del empleo femenino corresponde al sector servicios, debido en gran parte a la "clara división que presenta el mercado laboral". Como ejemplo, el estudio remite a la exclusividad femenina del personal de limpieza de interiores, entre otros trabajos. A igualdad de nivel educativo, experiencia, tamaño de la empresa y sector, ser hombre garantiza ganar "entre un 20% y un 35%" más. A ello se suma que las mujeres jóvenes presentan mayores dificultades para alcanzar un contrato definido y promocionarse, así como descansar al llegar a casa. El informe destaca que la mitad de las jóvenes entre 25 y 29 años comparten el empleo con labores domésticas, una cifra que se eleva a tres de cada cuatro para la franja que va de los 30 a los 39 años.

Pese a ello, la guía deja una puerta abierta a la esperanza. El futuro del empleo, señala, tiene un perfil marcadamente femenino, por lo que "el optimismo" está vinculado a los cambios de mentalidad de las mujeres: "la igualdad de oportunidades suele ser aceptada como un hecho y no como una aspiración".

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