Iar Siltal paraliza el expediente para cerrar su fábrica de Barcelona

El grupo italiano de electrodomésticos Iar Siltal, que había anunciado el cierre de su planta de Castellbisbal (Barcelona) -antigua fábrica de Corberó, marca que pertenece ahora a Electrolux- con 180 trabajadores, acordó ayer con los sindicatos aplazar la presentación del expediente de regulación de empleo que afectaba a toda la plantilla. El acuerdo prevé aplazar durante un mes la presentación del expediente para buscar salidas que garanticen la continuidad de esta fábrica histórica de cocinas.La decisión se produce después de que CCOO anunciase la presentación de una querella por supuesto delito social contra los italianos y contra la multinacional sueca Electrolux, antigua propietaria de la fábrica, que al vender a Iar Siltal, en 1995, conservó la propiedad sobre la marca Corberó. El comité intercentros se opuso al expediente de regulación de empleo en un escrito en el que acusaba a Electrolux de "dejar caer" la antigua fábrica de Corberó.

Según el escrito, la firma italiana fue usada "como testaferro para diluir sus responsabilidades". Los sindicatos afirman que, en 1995, "Electrolux trató de rescindir todos los contratos de trabajo existentes en la fecha, pero su expediente fue denegado por la Generalitat por no advertir causas y sí mucha mala fé".

El responsable del metal de CCOO en Cataluña, Simón Rosado, afirma que su sindicato sospecha que Iar Siltal ocultó un contrato de exclusividad por el que la fábrica de Castellbisbal produce cocinas únicamente para Electrolux. El comité intercentros opina que de las inversiones previstas por la empresa italiana en España "se han desviado unos 600 millones a otra empresa italiana".

La solución coyuntural de demorar el expediente un mes para buscar un comprador para la fábrica es un planteamiento de los sindicatos.