De Valdebernardo
Vivo en el barrio de Valdebernardo, de reciente construcción, de protección oficial. Quiero denunciar a las empresas constructoras que han dejado restos de obra sobre las calzadas y aceras, tales como pegotes secos de cemento, manchas de cola y pintura y otros restos de suciedad, además de romper baldosas y elementos urbanos. No sólo afean las calles estas porquerías, sino que son peligrosas, puesto que dan lugar a tropiezos y caídas, y son obstáculos para minusválidos. También incluyo como culpable al Ayuntamiento de Madrid, que permite esta forma de ensuciar sin importarle, puesto que allí siguen esos restos, y no obliga a los culpables a retirarlos, y les deja seguir haciéndolo, puesto que en otras obras que hay actualmente en marcha en el barrio, también lo hacen.Parece ser que a este Gobierno municipal sólo le preocupa llevarse el dinero por la venta de parcelas y concesiones de obras, despreocupándose de si son correctamente ejecutadas, y luego presumir de fomentar la vivienda social.-
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