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Chaves dice que Andalucía "será el valladar" contra los intentos privatizadores del PP Felipe González pide el voto para que el candidato socialista "tenga la mayoría de verdad"

Lourdes Lucio

Manuel Chaves se enfundó definitivamente ayer el traje de faena para mítines. El escenario fue un abarrotado auditorio de la Cartuja de Sevilla compartiendo escenario con Felipe González y Joaquín Almunia, en lo que fue el acto central de la campaña del PSOE de Andalucía. El candidato socialista a la reelección endureció sus críticas hacia el proyecto del Partido Popular (sigue sin aludir ni de pasada a la candidata conservadora Teófila Martínez) y advirtió que Andalucía "será un valladar contra cualquier intento de la derecha de privatizar la sanidad o la educación".

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De convite en Lebrija

Chaves se dio un baño de aplausos por partida doble: primero en el mitin de Sevilla y después en una comida con militantes en Lebrija, donde está la agrupación más numerosa del PSOE andaluz. Agradeció sobre todo esta última reunión -"nos sirve para cargar las pilas y salir por esa puerta como una moto", dijo-, en la que González, en un tono más intimista que el del mitin, explicó una vez más su proyecto Andalucía Emprende y pidió el voto para "ganar de corrido, por mucho, en Andalucía para que Manolo tenga mayoría de verdad y Joaquín en la Moncloa". El candidato del PSOE a la presidencia de la Junta aceró ayer sus dardos contra el Partido Popular y José María Aznar. En sus intervenciones siempre se refiere al proyecto nacional de esa formación y nunca al que encabeza en Andalucía Teófila Martínez, a quien cita sólo en el caso de que se le pregunte. Fue González quien aludió a la aspirante del PP a la presidencia de la Junta, preguntándose entre sorprendido y divertido por qué le lanza críticas tan feroces. El ex presidente del Gobierno instó a Martínez a que aclarase "de qué va eso de las asustaviejas de Cádiz para poder recuperar inmuebles y poder hacer negocio, ya que de eso sabe ella" y empezó el estribillo de una letra de Carnaval, que no terminó, con el nombre de la candidata que finaliza de manera despectiva.

Chaves aseguró que el PP "en vez de un programa tiene un catecismo con tres mandamientos: amarás el dinero por encima de todas las cosas; enriquecerás a tus amigos y no repartirás a los ciudadanos que realmente lo necesitan para resolver sus problemas". Felipe González, candidato al Congreso por Sevilla, le corrigió este último: "Hay una expresión más castiza para el tercer mandamiento: el que parte y reparte se lleva la mejor parte". Chaves aseguró que los socialistas andaluces denunciarán los intentos de trasladar a la iniciativa privada la gestión de hospitales o colegios. Lo dijo con estas palabras: "Andalucía va a ser el valladar contra cualquier intento aquí o fuera de la derecha de privatizar la parte más rentable de la sanidad o la educación".

20 años más

El candidato a la reelección hizo un recorrido rápido por el avance experimentado por Andalucía desde que gobiernan los socialistas. Frente al mensaje del PP de que es necesaria una revolución para cambiar el paso lento de los 18 años de gobiernos socialistas en Andalucía, Manuel Chaves argumentó que el reto de las nuevas tecnologías y el cambio de mentalidad emprendedora necesario lo tiene que liderar el PSOE. "Si hemos marcado estos últimos 20 años, también los próximos 20", proclamó.

Esta idea le sirvió de percha para dirigir una retahíla de reproches contra el Partido Popular, cuyo Gobierno "ha supuesto una continuación histórica del fracaso de la derecha para con Andalucía", según dijo. Chaves está citando cada vez con mayor frecuencia en sus actos públicos, ya sean multitudinarios como el de ayer o más reducidos como el del primer día de campaña, el hecho de que Aznar no le haya recibido como presidente de la Junta, pese a que muestra un cierto pudor a hablar de sí mismo. La razón de que saque a airear la negativa a una entrevista del presidente del Gobierno está en las encuestas que maneja la ejecutiva regional del PSOE: este hecho es conocido casi por el 70% de la población -de la polémica del censo, machada por los socialistas en los últimos cuatro años, sabe de ella el 42,8%- y es considera como injustificable por tres de cada cuatro entrevistados.

En opinión de Chaves, Aznar se ha guiado en esta legislatura con Andalucía "por el rencor y el resentimiento", ha "tratado de doblegar a la comunidad" y "ha tenido una intención clara de discriminar a una región de 7,2 millones de habitantes". La razón de este proceder, según él, hay que buscarla en los votos y en el hecho de que Aznar no acepte que Andalucía apoyase al PSOE en las elecciones legislativas y autonómicas de 1996.

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