Los musulmanes piden centros con educación islámica

El Estado español reconoce por ley, desde 1992, el derecho del alumnado a recibir enseñanza religiosa islámica. De hecho, el Ministerio de Educación y Ciencia aprobó en 1996 el currículo de esta asignatura en la Educación Secundaria Obligatoria y en el Bachillerato y, más recientemente, el ministro Mariano Rajoy anunció la contratación de profesores para impartirla. Algo que aún está por llegar.Sin embargo, el establecimiento de esta asignatura de religión islámica no parece ser una prioridad para los musulmanes andaluces.

"Que se imparta esta asignatura no supone ningún logro. No es nuestra meta", asegura Abdelghani Melara, representante de la Comunidad Islámica de España en Granada. "Nuestro objetivo", explica Melara, "es conseguir una educación íntegramente islámica. Que los profesores de todas las asignaturas, desde las Matemáticas a la Historia, sean musulmanes. Que los niños puedan estudiar árabe y el Corán. En definitiva, que haya colegios para musulmanes".

La mayoría de los hijos de los 250 miembros que esta comunidad tiene en Granada estudia en colegios públicos. La mayor parte también elige la asignatura de Ética en lugar de la de Religión Católica.

Melara opina que la creación de una asignatura de religión para musulmanes carecería de sentido. "La religión islámica afecta a todos los ámbitos de la vida y no tiene sentido relegarla a una asignatura de colegio. Perdería interés para los niños, se convertiría en una maría, en algo aburrido, fácil de aprobar y sin mucho valor".

Además, Melara teme que aunque la creación de esta asignatura puede tener una voluntad integradora pudiera tener unos efectos imprevistos y negativos de disgregación social.

Actualmente, los niños musulmanes reciben en casa su educación religiosa. Sus padres hacen de profesores. "Aunque lo ideal sería contar con nuestras propias escuelas", repite Melara.

En Granada, la Comunidad Islámica de España ya tienen en proyecto la creación de un centro educativo privado. "Se llamaría La Maestranza y hemos entablado conversaciones con la Consejería de Educación de la Junta para intentar legalizarlo", explica Melara.

La mayoría de los miembros de esta comunidad son españoles que recibieron una educación católica de pequeños y que se han convertido al Islam. "Por ello", explica su representante, "ni nosotros ni nuestros hijos tenemos problemas de integración".