"El talante del PP indica que el 'caso Naseiro' sigue vivo"

Juana Serna mantiene que la abstención es de izquierda, producto de los casos de corrupción que España ha pagado "muy caros", pero los ciudadanos han caído en la cuenta de que castigando al PSOE se castigan con un Gobierno de derecha.Pregunta. Los socialistas valencianos afrontan la campaña con una dirección provisional producto de una crisis interna importante. ¿Incidirá en las urnas?

Respuesta. Espero que no. Entiendo que mi partido, a veces, es democrático hasta la exageración, pero a menudo digo que el señor Zaplana no hubiese durado ni dos minutos por el modo autoritario como lleva el PP.

P. ¿Es posible la unidad de los socialistas valencianos a corto plazo?

R. Completamente. Esta crisis es coyuntural y llegaremos sin duda a un acuerdo. Me hubiese gustado protagonizarlo yo cuando presidí la gestora.

P. ¿Está frustrada por no haberlo logrado cuando se hizo cargo de la primera dirección provisional del partido?

R. En absoluto, porque trabajé muchísimo, y aunque dialogué con todo el mundo no conseguimos llegar a una conclusión. Pero, como dice Almunia, lo conseguiremos después de las elecciones, en las que vamos a subir en votos recuperando la abstención.

P. ¿La abstención es de izquierda?

R. Sí. La gente estaba enfadada con nosotros, pero ahora, cuando voy a los mercados y me reúno, me dicen que ya no pueden castigarnos porque se están castigando a sí mismos. La gente sabe que España ha pagado muy cara la corrupción del señor Roldán. La ventaja de Almunia es que es un hombre riguroso y serio, que sabe perfectamente que nos jugamos el futuro de España. Hemos pedido disculpas hasta la exageración para no volver a perder. Por el contrario, cuando a Aznar le surgen corrupciones, como el caso Ivex en Valencia o Arturo Moreno y su clan de Valladolid, mira hacia otro lado. Este talante nos demuestra que el caso Naseiro sigue vivo.

P. ¿Qué ha hecho su partido para recuperar el voto perdido?

R. Entender que el pacto por la izquierda es posible, efectivo y bueno para la mayoría. Pensemos, por ejemplo, que con la política de Aznar se ha duplicado la inflación en un año, pasando del 1,4% al 2,9%. Cuando los socialistas llegamos al poder, recibimos una inflación del 14%, y cuando perdimos la dejamos en el 3,4%. Eso significa que la rebajamos en 10 puntos. El PP la recogió en un 3,4% y la deja en un 2,9% después de cuatro años. Sólo ha sido capaz de rebajar medio punto. Si hablamos de privatizaciones, no tienen nada que ver las del PSOE con las del PP. Nosotros privatizamos para conseguir una mayor competencia en nuestro país que implicara mejoras para los consumidores. La derecha está creando oligopolios económicos y mediáticos con una trastienda política. Por eso decimos que el bienestar no lo consiguen para todos, sino para sus amigos. Sus privatizaciones afectan a la democracia y a la libertad. Con el PP la libertad se está convirtiendo en un lujo que no todo el mundo puede pagar.

P. ¿Son éstos los comicios del bipartidismo?

R. Para la derecha sí, porque está toda unida. Nosotros respetamos la izquierda plural. Desde las elecciones autonómicas vamos en coalición con Nueva Izquierda, que no ha perdido su identidad. Espero que el pacto de investidura y de Gobierno con IU tenga tan buenos resultados.

P. En Alicante se enfrenta a Federico Trillo, un peso pesado del PP.

R. Un candidato que tiene una debilidad: nunca viene por Alicante. Hace 10 días le envié una carta para pedir un debate y no me ha contestado.

P. El PP y Trillo prometen desbloquear el Plan Hidrológico Nacional, clave para el desarrollo de la Comunidad Valenciana.

R. Al cartel en el que Aznar aparece con la palabra Hechos, habría que añadir la de Incumplidos. El déficit hídrico en mi provincia es brutal, las infraestructuras deficitarias, los problemas de medio ambiente graves, y la innovación escasa. Nosotros retomaremos el Plan Hidrológico que dejó Borrell en la mesa.

P. Alicante no es El Ejido, pero ha registrado problemas con los inmigrantes que quieren regularizar su situación.

R. Últimamente, la derecha está mostrando su peor cara. En El Ejido, con Pinochet y con el partido nazi austriaco. Después de dos años perfilando la Ley de Extranjería, deberían haber tenido una Administración más preparada. Nosotros simplificaremos las exigencias para vivir y trabajar en España, y llegaremos a acuerdos bilaterales con los países del Magreb y América Latina fundamentalmente, para poder ejercer un control político de la inmigración, y no sólo policial como hace el PP.