Protestas por el uso electoral de la apertura de las vías en Castellón
Esta tarde pasarán los primeros trenes de cercanías por las entrañas de Castellón: el soterramiento de las vías es ya una realidad. Mañana circularán por el trazado subterráneo y la nueva estación los de largo recorrido. Tras casi cinco años de obras, el Ministerio de Fomento ha preparado un acto para mañana que no es del gusto de todos. La proximidad de las elecciones ha abierto una brecha entre las fuerzas políticas y sociales de Castellón.La eliminación de la barrera urbanística que suponían las antiguas vías, una vieja aspiración ciudadana, se verá empañada por lo que se considera una utilización electoral del evento. Fuerzas sociales y políticas han reprochado a los populares que hayan hecho coincidir este día histórico con los comicios generales. Algunos partidos y colectivos vecinales ya han anunciado su ausencia en señal de protesta de los actos que presidirá el ministro Rafael Arias Salgado; otros, como los socialistas, acudirán, pese a que, en palabras de su portavoz municipal, Ignacio Subías, "es una engañifa y una escena propia de Bienvenido Míster Marshall". Los socialistas cuestionan el acto, ya que la Subdelegación del Gobierno confirmó a la Junta Electoral que no es una inauguración al no estar finalizadas las obras. "Arias y Zaplana, por tanto, vendrán a la no inauguración", declaró Subías, quien, no obstante, mostró su satisfacción por la culminación de las obras, en cuyo inicio participaron instituciones gobernadas por los socialistas.
Retraso interesado
Los actos incluyen una visita a la nueva estación y la supresión posterior, de forma simbólica, de la barrera ferroviaria que partía la ciudad en dos. Esquerra Unida rehusó ayer acudir a estos actos que, según su candidato al Senado, Vicent Grau, "se han dilatado en el tiempo adrede". Según Grau, algunos comercios de la zona se han visto en apuros económicos por estos interesados retrasos de más de seis meses en las obras de culminación de este proyecto cuyo coste ha rebasado los 23.000 millones de pesetas. Grau, presidente de la Asociación de Vecinos del barrio donde se ubica la nueva estación, señaló que "el acto es ofensivo" para el Consejo Municipal de Participación Ciudadana, que reclamó una fiesta cívica sin "manipulación política".
El Bloc Nacionalista, a través del edil Antoni Porcar, manifestó ayer que los populares han "disfrazado vergonzosamente" de acto de apertura esa inauguración oficiosa por miedo a la Junta Electoral. Porcar cree que "el PP confunde los intereses partidistas con los institucionalistas". "El soterramiento ha sido una reivindicación ciudadana por la que se celebraron muchas manifestaciones", dijo Porcar.
El presidente de la Federación de Asociaciones Ciudadanas, Amalio Palacios, opinó que "por desgracia" la puesta en servicio del nuevo túnel de cuatro kilómetros y medio tiene un uso partidista. Ayer su organización aún no había sido invitada, aunque él ya había decidido no ir, en protesta por las ganas de los políticos de uno y otro bando por "salir en las fotos".
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