La Diputación vizcaína sigue sin definir el proyecto y la financiación de la futura carretera de peaje bajo la Ría

La Diputación de Vizcaya sigue con sus dudas sobre la futura carretera de peaje bajo la Ría en Leioa, un vial de 3,5 kilómetros (2,5 subterráneos) que unirá la autopista A-8 con la rotonda de Artaza en Leioa. Todavía no ha definido el tipo de proyecto ni la financiación, y además baraja cambiar la fórmula para la adjudicación de la obra: pretende que las empresas privadas elaboren también el proyecto."Nos gustaría sacar la licitación este año o quizás el próximo", dijo ayer ante la comisión de las Juntas Generales el diputado de Obras Públicas y Transportes José Félix Basozabal. La obra, cuya ejecución se preveía en principio para este mismo año, tendrá una demora aún sin concretar. Basozabal anunció que se elaborará un plan especial de ordenación para la zona de la rotonda de Artaza, en Leioa, donde saldrá el túnel. El diputado reconoció que la obra creará en esta área -muy densamente poblada- una barrera física, "por lo que es necesario consensuar con los implicados la solución definitiva". "Este problema con la conexión nos está originando retrasos pero es preferible arreglarlo aunque tardemos más", añadió.

Su departamento estudia que la concesión de la obra incluya también la elaboración del proyecto. "Es una solución que se está desarrollando en el Estado con los trenes de alta velocidad. Se saca a concurso no sólo la concesión, sino también los proyectos técnicos, para que sean financiados por todas las empresas que participan en el concurso. Luego el adjudicatario se queda con el estudio y paga a las demás empresas".

Basozabal reiteró que el fututo vial tendrá financiación privada y pública. Calculó que el coste ascenderá hasta los 25.000 millones, de los que cerca de 15.000 recaería en manos privadas y 10.000, en la Diputación. Sobre el tipo de proyecto, Obras Públicas continúa con las tres opciones elegidas en 1988: dos túneles de forma ovalada o circular y un único soterramiento con dos calzadas superpuestas. "Tenemos un debate interno, sobre todo por el tema de la seguridad. La que más nos atrae es la de las calzadas superpuestas".

Debate sobre Bideak

IU y EH coincidieron en rechazar una mayor implicación de las empresas privadas. "Es muy peligroso que un proyecto así se deje desde el principio en manos de la iniciativa privada", dijo Txema Pico (EH). La comisión de ayer en las Juntas Generales ofreció de nuevo el debate sobre Bizkaiko Bideak, la sociedad foral creada en 1997 para acometer la construcción de carreteras sin necesidad de recurrir sólo a los presupuestos. Basozabal dijo que pretende convertirla en una agencia pública de carreteras, "un modelo que está extendido en Estados Unidos y es como se construyen allí las infraestructuras viarias".

El diputado explicó el plan de actuación de Bideak hasta el año 2016, que supone una inversión de 136.000 millones. Más de la mitad de estos recursos procederían del peaje de la A-8 -cuando en junio de 2003 se haga efectiva la transferencia al País Vasco-, los cánones de las nuevas áreas de servicio e incluso posibles excedentes de la concesión de los túneles de Artxanda.