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THE NEW YORK TIMES Los escombros de Grozni

Puede que estemos en 2000, pero Grozni podría ser confundida con las ruinas humeantes de una ciudad europea en 1945. El Ejército ruso ha convertido la capital chechena en un infierno inhabitable con sus bombardeos. (...) Para el mundo, que ha observado la ofensiva rusa con repulsión, la bandera tricolor que ahora ondea en Grozni se ha convertido en un símbolo vergonzoso. (...) Es claro que el objetivo primordial del Kremlin no fue nunca la prevención del terrorismo checheno, y que las aproximaciones moderadas fueron inmediatamente transformadas en una estrategia bélica. El objetivo real era el de vengar la derrota militar de Rusia de 1996 y favorecer el destino político del primer ministro Vladímir Putin. (...) Ambos objetivos se han llevado a cabo con un precio elevadísimo en sangre y valores morales. (...) Más de 200.000 chechenos han abandonado su país. Desde octubre, más de un millar de soldados rusos han perdido sus vidas en Chechenia, y unos 3.400 han resultado heridos. Putin, por su parte, ha explotado el apoyo popular a la guerra para favorecer su candidatura a las elecciones presidenciales del próximo mes. Pocos políticos rusos se han atrevido a cuestionar la masacre en Chechenia. La única esperanza ahora es que Rusia permita que las organizaciones internacionales suministren ayuda humanitaria a los civiles chechenos. (...) Moscú tendrá suerte si la guerra no produce ataques terroristas de represalia. Muchos rusos piensan que la captura de Grozni es una causa para celebrar. Putin no hace ningún favor a sus compatriotas fomentando esa reacción tan equivocada.Nueva York, 9 de febrero

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