'La Peineta', un estadio de bajo uso

El estadio de atletismo de la Comunidad, conocido como La Peineta, comenzó a construirse en 1992 en pleno auge olímpico en Barcelona. El Gobierno regional quiso que la capital contase con un gran estadio y encontró su ubicación en un terreno situado en el distrito de Canillejas. Para diseñar el estadio contrató a los arquitectos Antonio Ortiz y Antonio Cruz, dos de los autores más universales de la conocida como escuela del destello sevillano. Ortiz y Cruz también han proyectado el Estadio Olímpico de Sevilla. La Peineta, levantada sobre una parcela de 120 hectáreas, supuso una inversión de 6.900 millones de pesetas, contó con una subvención de 840 millones del Consejo Superior de Deportes y estaba llamada a ser la pieza clave de un complejo que con el tiempo podría convertirse en el escenario de unos Juegos Olímpicos. Casi siete años después, La Peineta es un estadio de bajo uso, que no ha logrado albergar a los grandes atletas de la zona y que padece graves problemas de deterioro en las zonas urbanizadas.Antonio Ortiz recibió en 1997 el encargo de diseñar lo que sería el cierre del estadio -ahora sólo hay una grada para, aproximadamente, 20.000 espectadores-, pero no recibió respuesta. "La Peineta es una instalación de bajo uso", explica Ortiz. "Hace tiempo que tengo la sensación de que a nadie le interesa seguir adelante. Hace más de un año que no paso por allí. No creo que exista la intención de trabajar en mejorar las instalaciones".Una zona de llamado espacio urbanizada presenta desde hace cuatro años un hundimiento. "Los terrenos sobre los que se construyó el estadio fueron minas de sepiolita y tuvimos que reforzar más de lo normal toda la cimentación. Esos desperfectos deben ser consecuencia de los problemas del terreno".

Tras cuatro años en busca del dinero necesario para rehabilitar la zona, parece que en los próximos meses comenzará la restauración.