La corbata de Gloria Fuertes: Ismael, heredero de la poeta, organiza en Móstoles una muestra con sus objetos personales

Un íntimo amigo de la desaparecida poeta Gloria Fuertes, el cantautor Ismael, le ha tributado un pequeño homenaje en el centro cultural Joan Miró, de Móstoles (196.500 habitantes). Hasta el 7 de febrero, y bajo el título de Gloria Fuertes, de cerca, en la sala principal de este edificio se exhiben más de un centenar de objetos personales de la escritora cuyas obras tuvieron en los niños sus principales destinatarios. Desde fotografías de hace más de 50 años y su carné de identidad, hasta la ropa más característica de la poeta aparecen en la muestra.La amistad de Ismael con Gloria Fuertes comenzó en los años cincuenta. Ambos eran asiduos del bar La Tortuga, en la plaza de la República Argentina (Chamartín), donde se reunían todos los poetas de la época "para hablar libremente", recuerda Ismael. "Entonces, aquel lugar estaba en las afueras e iba gente tan importante como Carmen Conde, Manuel Alcántara o Francisco Nieva", describe. Desde el primer momento le sorprendió "el carácter abierto" y la sencillez de la poeta. A partir de entonces fueron grandes amigos. Ismael llevó hasta la televisión el programa La banda del Mirlitón, que estuvo cinco años en pantalla. Allí se hizo famosa una de las poesías de Gloria Fuertes a las que puso música el cantautor, ¿Dónde vas, carpintero?

Cuando se abrió el testamento de la escritora, Ismael descubrió que le había legado todos sus objetos personales. El cantante se los llevó a su casa en las afueras de Madrid hasta que encontró un lugar para exhibirlos. Ahora, en el centro Joan Miró se pueden ver desde los premios literarios ganados por Gloria Fuertes hasta sus objetos de maquillaje. "Siempre recuerdo su ingenuidad, su gracia y su enganche. Tenía un carácter abierto como el descaro de un niño. Al recopilar sus objetos me ha sorprendido su particular religión. En las patas de una mesa había escrito: "Querido Dios, te pido amor, salud y que no me dejes nunca. Glorita", asegura Ismael. En una agenda que se exhibe en Móstoles, la escritora puso que, en caso de accidente, "avisar a Dios".

En Gloria Fuertes, de cerca, también se puede ver una de las corbatas que le regaló el rey Juan Carlos. Gloria Fuertes acudió a una recepción de la Casa Real de corbata, sin vestir de etiqueta, "como acostumbraba", narra Ismael. Estuvo charlando con el Rey, "porque eran muy buenos amigos". Al año siguiente, don Juan Carlos le dijo que había venido con la misma corbata que a la recepción anterior. Ella le contestó con una gran sonrisa que era la única que tenía. El Rey le mandó a la semana siguiente seis corbatas de las que fabrican en Italia en exclusiva para él. "Cuando recogimos todos sus objetos, vimos que tenía más de 200. Ella era así. Tenía un carácter muy extrovertido. Daba la misma importancia a un retrato firmado por Francisco Nieva como a otro regalado por un niño", comenta Ismael. Su lema era: "Yo me marcho a la guerra para pararla".

Gloria Fuertes, de cerca. Centro Cultural Joan Miró (París, 5), Móstoles. Hasta el 7 de febrero. Gratuito. Información: 91 645 52 92.