El Banco Mundial da por cerrada la crisis financiera de América Latina
El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Enrique Iglesias, y el vicepresidente para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, David de Ferranti, destacaron ayer que las economías de Latinoamérica han recuperado la estabilidad e iniciado la modernidad productiva. Las crisis de los últimos años se encuentran más o menos superadas y los países tienen ante sí una perspectiva de crecimiento sostenido y gradual, según dijeron en una jornada sobre el desarrollo económico y social en América Latina, organizada por el semanario The Economist. No obstante, ambos subrayaron que en el área existe "una alta vulnerabilidad social", destacando el alto índice de pobreza (una tercera parte es pobre y el 17% de la población es sumamente pobre). También destacaron como principal problema la alta tasa de paro. Para reducirla, Iglesias señaló que es necesario que el crecimiento de la economía sea el doble del previsto (entre el 3% y el 3,5%). Para ello es necesario, según esgrimieron, que se produzca un nexo de unión entre la lucha contra el desempleo y la pobreza y la inversión privada: creación de programas sociales (educación, sanidad...) y aceleración de las infraestructuras y desarrollo financiero de los países.
"España es la llave que puede abrir al mundo las posibilidades inversoras de América", dijo De Ferranti, quien ayer presentó en Madrid un informe del Banco Mundial que señala que la nueva tendencia para el siglo XXI es "la localización". Según el análisis del Banco Mundial, "la localización podría revolucionar las posibilidades del desarrollo de la humanidad o bien provocar el caos y agravar su sufrimiento". "La mundialización es como una ola gigantesca, que puede arrastrar naciones a su paso o hacerlas avanzar", señaló Joseph Stiglitz, primer vicepresidente y primer economista del Banco Mundial. "Si la localización logra sus objetivos, las entidades locales y otros grupos sociales -la tripulación del barco por así decir- pueden ejercer su autonomía pero también encuentran incentivos para trabajar juntos".
