México expulsa a otros dos etarras a España en menos de 24 horas

Menos de 24 horas después de la entrega a España por parte de las autoridades mexicanas de dos etarras que residían de manera irregular en ese país, a mediodía de ayer llegaron a Madrid otros dos miembros de ETA expulsados por México. Mikel Arrieta Llopis, de 39 años, está acusado de cinco asesinatos, entre ellos el del ingeniero de la central nuclear de Lemóniz Ángel Pascual, y José Ángel Ochoa de Eribe Landa, de 41 años, de colaborar con el comando Araba hasta su desarticulación en 1989.

Arrieta y Ochoa de Eribe fueron detenidos el domingo en México y expulsados ayer a España. Llegaron a mediodía en un vuelo regular de Aeroméxico al aeropuerto de Madrid-Barajas, custodiados por agentes mexicanos de inmigración que les entregaron a la policía española. Con éstos son ya 15 los miembros de ETA expulsados por México desde 1996. Como Miguel Santiago Izpura y Josu Gotzon Larrea (los otros dos etarras entregados por México el domingo, que hoy serán interrogados por el juez Baltasar Garzón) Arrieta y Ochoa de Eribe fueron conducidos a la comisaría y luego pasaron a disposición de la Audiencia Nacional. Esa instancia judicial tenía dictadas cuatro órdenes de busca y captura contra Arrieta por asesinato, pertenencia y colaboración con banda armada, y tres contra Ochoa de Eribe por terrorismo, atentado y robo con intimidación. Las fuerzas de seguridad atribuyen a Arrieta haber participado en marzo de 1982, como integrante del comando Vizcaya, en el atentado al restaurante Rancho Chileno de Sestao, en el que murieron los policías Agustín Martínez Pérez y Alfonso Maside Bouzo, así como la empleada del local Cristina Illarramendi, informa Vasco Press. En abril de ese año participó en el lanzamiento de granadas contra el cuartel de la Guardia Civil de La Salve y en mayo en el asesinato del ingeniero de la central nuclear de Lemóniz Ángel Pascual Múgica. Se le implica un mes después en el asesinato del jefe de la policía municipal de Barakaldo José Aybar Yáñez, en un atentado en el que también falleció el etarra Javier Zabaleta Urretavizcaya, Jatorra, alcanzado supuestamente por disparos realizados por Arrieta. Ochoa de Eribe colaboró con la infraestructura del comando Araba entre 1984 y 1989. En su domicilio se fabricó supuestamente la bomba que mató a dos policías en 1987 en el Alto de Armendia.

[Por otro lado, la policía francesa detuvo ayer en Ayherre a Eñaut Eloseguy y Patricia Martinon por su presunta relación con el robo de ocho toneladas de explosivos en Bretaña en septiembre pasado, informa Efe.]