Archivada la querella por el derrumbe de una fachada del hospital Valdecilla

El juez Arturo Zamarriego, que instruye las diligencias previas por la muerte de cuatro trabajadores, el 2 de noviembre de 1999, a causa del derrumbamiento de una fachada del hospital Valdecilla, ha decidido el archivo de la querella presentada por UGT, en la que se acusaba a los directores del Insalud y del hospital de la comisión de cuatro homicidios por imprudencia, castigados con entre uno y cuatro años de prisión. Según la central querellante, los acusados conocían desde hace más de cuatro años el deficiente estado de conservación del edificio sin que adoptaran medidas para prevenir daños a terceros.

Tras su investigación sobre los hechos y dos meses después de haberse presentado la querella, el auto del juez Zamarriego considera "imprevisible" la tragedia y no ve indicios de criminalidad en la actuación de los dos altos dirigentes de la sanidad en Cantabria acusados por UGT. La decisión judicial ha producido sorpresa y malestar en esta central sindical, que ahora se dispone a presentar recurso de reforma ante el mismo juzgado de instrucción número 3 que ha decidido el archivo de la querella.Hace cinco años el Insalud de Cantabria encargó a una empresa especializada un estudio de la estructura y fachadas del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. El informe emitido proclamaba que los elementos estructurales estudiados proporcionaban valores de coeficientes de seguridad acordes con la normativa, pero anunciaba problemas de humedades en la fachada siniestrada en noviembre pasado. Las vigas de la estructura de la planta 12 bajo el helipuerto presentaban asimismo oxidación y exfoliación superficiales.

El secretario general de UGT en Cantabria, Ignacio Pérez, considera que los informes técnicos en los que se basa el juez para argumentar el auto no son suficientes para demostrar que el accidente fue fruto del "azar". Pérez, quien aclaró a la agencia Efe que su sindicato no ha recibido todavía el auto y, por tanto, no ha podido analizarlo en profundidad, insistió en que ha habido "desidia y falta de inversiones" en el centro sanitario y subrayó que existen informes previos al derrumbe de la fachada que advertían de que el accidente podía suceder.

Imputaciones de homicidio

La querella del sindicato UGT, a la que se sumó CCOO, imputaba cuatro delitos de homicidio por imprudencia al director del Insalud en la comunidad autónoma de Cantabria, al director gerente de Valdecilla y a su jefe de mantenimiento por considerar que conocían el deficiente estado de conservación del edificio desde hace al menos cuatro años.

Para el director gerente del centro hospitalario santanderino, Ignacio Iribarren, la decisión del juez de archivar las diligencias penales "es una tranquilidad personal", aunque señaló que "estaba seguro" de que se iba a producir esta resolución. Iribarren indicó, en declaraciones a los medios de comunicación, que el archivo de las diligencias, así como la no admisión de la querella interpuesta por los sindicatos UGT y CCOO, permitirá que "nos apliquemos al duro trabajo diario".

El magistrado considera que el siniestro ocurrido fue "imprevisible", una conclusión, añade, en la que coinciden todos los informes técnicos: el pericial, el suscrito por el arquitecto jefe del Ayuntamiento de Santander y el elaborado por los servicios técnicos del centro sanitario.