El Gobierno sólo enviará a Straw las alegaciones de Garzón si aporta novedades

El Gobierno español "estudiará" las alegaciones que el juez Baltasar Garzón presentará hoy mismo al Ministerio de Asuntos Exteriores. "En la medida en que no haya elementos nuevos", según un portavoz del ministerio, "el Gobierno no piensa formular alegaciones". Sólo si hay novedades, el Gobierno se compromete a estudiarlas y tramitarlas. Garzón recoge en sus alegaciones un escrito de las acusaciones en el que se indica que la decisión de Jack Straw está basada "en una declaración de médicos británicos en relación con la salud del procesado [Pinochet]. Sin embargo, no acompaña el diagnóstico de éstos, lo que impide cualquier valoración de aquélla". En el Congreso, la oposición -PSOE e IU- dijo ayer que el Gobierno "tiene la obligación" de tramitar las alegaciones. El ministro chileno de Exteriores, Juan Gabriel Valdés, ha declarado a EL PAÍS que el ministro Abel Matutes le ha asegurado que "no va a haber recurso que cuestione la decisión británica". Frente a la actitud española, el Gobierno francés anunció ayer que presentará "inmediatamente" al Ejecutivo británico la petición de un juez parisiense que quiere interrogar a Pinochet en Londres. Asimismo, el ministro belga de Asuntos Exteriores, Louis Michel, afirmó que Pinochet debe ser juzgado a menos que se demuestre que "está loco", y anunció que Bélgica piensa mantener su demanda de extradición. En Chile, el juez Juan Guzmán, que instruye 55 denuncias contra Pinochet, tiene intención de someter al ex dictador a un nuevo examen médico y sólo pondrá fin a sus investigaciones si se deduce que el general está mentalmente incapacitado. La sombra de Pinochet se ha impuesto en el cierre de campaña de las presidenciales de este domingo.