Egibar dice que debe exigirse la autodeterminación de Euskadi aunque la banda actúe

El portavoz del PNV en el Parlamento vasco, Joseba Egibar, aseguró ayer que la reivindicación del "derecho de autodeterminación o cualquier otro derecho" no debe ser aparcada "aunque ETA actúe", ya que ello supondría reconocer a la banda "la posibilidad de condicionar la política vasca". Luego, precisó que el proceso abierto en Euskadi "es irreversible" y acusó al PP y el PSOE de usar a los presos etarras y al "hecho vasco" como "reclamo electoral".Egibar, que hizo estas declaraciones durante la presentación en Madrid de la Plataforma Batera, en favor de los derechos de los reclusos vascos, explicó que relegar la exigencia del citado derecho por un atentado de ETA "sería como dejar el mando y la batuta" a los terroristas y concederle "una oportunidad política y estratégica" para que "marque el guión político del país". Además, mostró el deseo del PNV de que se restablezca la tregua porque, "a pesar de los altibajos, ha sido un factor positivo".

"Reclamo electoral"

El portavoz del PNV acusó al PP y el PSOE de usar a los reclusos como "moneda de cambio" para lograr "un rédito electoral en España". A su juicio, han introducido "en la coctelera electoral el hecho vasco" como "un reclamo" para las generales y advirtió de que todos los presidentes de Gobierno de España "han dejado de serlo por asuntos relacionados con el hecho vasco".

"Los presos, para el PP, y en concreto para el señor Aznar, y el PSOE constituyen una especie de dígito o variable electoral que puede reportar algún beneficio o perjuicio en función del movimiento. No reparan en utilizar a este colectivo desde esa dimensión estratégica, política y electoral", dijo.

La plataforma Batera fue presentada por su comisión permanente, formada por el PNV (Egibar), EA (Nekane Alzelai), HB (Jone Goirizelaia) e IU (Tomás Goikoetxea), los sindicatos ELA (Germán Kortabarría) y LAB (Jesús María Gete) y los colectivos Senideak (Tomás Carrera) y Gestoras pro Amnistía (Julen Zelaraín). Batera pretende defender "los derechos de los presos" y denunciar la política penitenciaria y el "menosprecio del Gobierno español y el francés" al deseo de la sociedad vasca de que cumplan sus condenas cerca de sus casas.

Carrera, el representante de Senideak aseguró que hay 449 presos vascos repartidos por cuatro países -53 de ellos, en Euskadi-, de los que 98 deberían estar en libertad condicional. Otros 16, añadió, han muerto "en prisión o como consecuencia de su paso por la prisión". Finalmente, cifró en 2.000 "los exiliados vascos".